Con los mismos cortapastas con los que hacemos nuestras galletas de Navidad, podemos hacer elementos decorativos para estas fechas. En muchos hogares se encienden velas en días especiales como estos, pues aportan calidez y ayudan a crear un ambiente acogedor y relajado, agradable para compartir la velada con familia, con amigos o con la pareja.
No todas las reuniones familiares o de amigos son adecuadas para recrear este tipo de ambientes, pues no siempre se pretende ofrecer ese espacio relajado, sino fomentar las charlas entre bocado y bocado, que se cuenten historias, chistes e incluso que haya quien se anime a cantar. Cada familia (elegida o no) es un mundo. Pero igualmente, las velas de Navidad pueden ser el elemento decorativo con el que recibir a los invitados o con el que hacer un regalo hecho con tus propias manos.
Por eso hemos querido compartir con vosotros la idea de utilizar los cortapastas para hacer velas de Navidad, y es tan sencillo como imagináis. Como podéis ver en las fotos, las velas que se pueden hacer son del estilo calientaplatos, pero podemos hacerlas de cualquier color, lo que no recomendamos es que sean velas de olor si se van a encender durante una comida o cena.
Para hacer velas de Navidad (o con cualquier otra figura para otras celebraciones, pues podemos tener cortadors de galletas con forma de árbol de Navidad, de estrella, de Papá Noel, de luna, de flor, de animales, de fruta, con forma de corazón, de regalo…) no sólo vamos a dar un doble uso a los moldes para galletas, también es la ocasión para aprovechar restos de velas que tengamos en casa.
Como comentábamos, se pueden utilizar velas de cualquier color o velas blancas, a éstas se les puede dar el color que deseemos con colorante. Así pues, el material básico para hacer velas decorativas y funcionales son las velas, la mechas o pabilos, un cazo y un bol (para hacer un baño maría), papel vegetal y los cortapastas.
Para empezar hay que colocar los trozos de vela en el recipiente para el baño maría y ponerlo al fuego. Ya sabéis que este método de cocción consta de un cazo con agua sobre el que se coloca un cuenco o un cazo de tamaño inferior para que el agua que se está calentando le transmita calor de forma suave y homogénea. El recipiente superior no debe tocar el fondo del cazo con agua. Sabréis que existen recipientes especialmente diseñados para hacer baño maría, quizá está en vuestro menaje de cocina.
Mientras se van fundiendo las velas, como cuando fundimos chocolate, preparamos el papel vegetal y sobre el colocamos los cortapastas y los pabilos, bien centrados. Ya sólo resta verter la cera fluida en el interior de los moldes de galletas y dejar enfriar para que se vuelva a solidificar. Conviene que la cera no esté excesivamente caliente ni líquida, además de presionar el cortapastas contra el papel vegetal para que no haya oportunidad de que la cera caliente se escape.
Cuando la cera se haya enfriado y solidificado, las velas ya se pueden retirar de los moldes de galletas, estarán listas para usar, colocándolas sobre un candelabro calientaplatos de tamaño adecuado, o para envolverlas para regalo.
Si queréis ver más fotos sobre la elaboración de estas velas, podéis acceder a este blog.