Varias cadenas de minoristas y empresas alimentarias del Reino Unido se han suscrito a un compromiso voluntario para eliminar los envases de plástico desechable para el año 2025, año en el que se han marcado objetivos como que el 100% del plástico que se utilice sea reutilizable, reciclable y compostable. El denominado ‘Pacto de los Plásticos del Reino Unido’ es una iniciativa pionera y colaborativa de WRAP (Waste & Resources Action Programme), organización sin ánimo de lucro que trabaja con el propósito de alcanzar una economía circular.
En este pacto se promoverán nuevos modelos comerciales innovadores, para reducir la cantidad total de envases de plástico, se ayudará a construir un sistema de reciclaje más sólido en el que las empresas y la sociedad en general asuman una mayor responsabilidad sobre los residuos que generan, se trabajará para garantizar que estos envases se puedan reciclar y convertir en nuevos productos y embalajes, siempre contando con el apoyo del Gobierno del país.
Se anuncia que el Pacto de Plásticos del Reino Unido que lidera la organización WRAP, es el primero de una serie de pactos para alcanzar la ansiada economía circular. El plan de cinco años pretende ser una revolución en el uso de los recursos (materiales) para reinventarlos y definir cómo se deben utilizar, para ello, se centran en tres áreas prioritarias que ayudarán a cumplir los objetivos marcados, el sector de la alimentación y las bebidas, el sector textil y el sector de los componentes electrónicos y eléctricos.
El pacto del plástico que lidera WRAP se ha puesto en marcha a través de la iniciativa New Plastics Economy de la Fundación Ellen MacArthur en colaboración con empresas, legisladores, académicos, ciudadanos, organizaciones ecologistas, etc. En ella se reúne a las partes interesadas para analizar y diseñar un nuevo futuro para este material empezando por el embalaje. En este pacto se han suscrito, por el momento, 68 compañías y empresas, como, por ejemplo, Coca Cola, Unilever, Arla, Danone, Lidl, Pepsico, P&G, Plastipack, Tesco, Morrisons, Federación Británica de Plásticos, etc. Todas las empresas manifiestan las razones por las que se han sumado a este pacto, básicamente todas dicen lo mismo, que los residuos de los envases son un problema que se debe abordar cuanto antes.
De todos modos, y a pesar de que The UK Plastics Pact es una iniciativa loable para acabar con los residuos plásticos, que sea un pacto de carácter voluntario le resta fuerza y efectividad, los más escépticos no están de acuerdo con su carácter voluntario, considerando que se trata de un conjunto de promesas que no cuentan con un mecanismo de aplicación. Las empresas han sido conscientes de los problemas que causaban estos envases desechables, pero han obviado el tema en cuanto se ha hablado de introducir impuestos, de legislar la obligación de recuperar los desechos plásticos, etc., las empresas quieren mostrar una imagen de que se preocupan y que quieren realizar un cambio profundo.
No se entiende que se hable de eliminar los plásticos «innecesarios» de un sólo uso para el año 2025, mientras que las empresas se han negado continuamente a proporcionar datos sobre la cantidad de envases desechables que ponen en circulación en el mercado, sin contar con estos datos, hacer planes y marcar objetivos resulta más complicado. Sobre la iniciativa, Michael Gove, secretario de Medio Ambiente del Reino Unido comenta que es necesario que las empresas trabajen en colaboración con el Gobierno para alcanzar las metas del pacto, asegura que la industria puede evitar que el exceso de plástico llegue a las estanterías de los supermercados.
El secretario ha anunciado un plan para promover el reciclado de envases de bebidas mediante un plan de devoluciones de envases, por otro lado, otros minoristas también han anunciado sus propios planes para reducir el consumo de plásticos, las cafeterías dicen que reducirán el uso de vasos desechables, todos parecen volcarse en ese objetivo del pacto, pero que no cuente con un mecanismo de aplicación que obligue a cumplir las metas es un error, ya sabemos lo que suele ocurrir con las iniciativas de carácter voluntario.
Algunas empresas explican que todos tenemos un papel que desempeñar en la reducción de la cantidad de plásticos utilizados en la sociedad, por lo que, por su parte, aceptan sus responsabilidades y por ello están trabajando para reducir su uso en sus negocios, pero lo cierto es que es no ha sido por iniciativa propia. Hay que tener en cuenta que los supermercados de este país pagan menos por recolectar y reciclar sus desechos que en cualquier otro país europeo, lo que debería haber impulsado antes el reciclaje.
Además del objetivo de que el 100% del plástico que se utilice sea reutilizable, reciclable y compostable, se han marcado otros, como que el 70% debe ser reciclado o que se convierta en compost de manera efectiva, y que todos los nuevos envases de plástico integren, al menos, un promedio del 30% de material reciclado. Recordemos que, hasta la fecha, las empresas han sido reacias a utilizar material reciclado, de ello hablábamos en este post. Según leemos aquí, Amigos de la Tierra da la bienvenida a este pacto que se dirige en la dirección correcta, pero considera que debe ir acompañado de medidas gubernamentales para garantizar que todos hagan su parte y que estos objetivos se cumplan, algo que se podría plasmar cambiando de carácter voluntario a carácter obligatorio.
El vídeo que podéis ver a continuación y que forma parte de la campaña, habla de que existe otro modo de hacer las cosas a fin de evitar los residuos plásticos, que toda la sociedad unida puede crear un sistema sostenible para este material, que aborde la cultura del “usar y tirar”. A través de este enlace (Pdf) podéis conocer el ‘Pacto de Plásticos del Reino Unido’ que lidera la organización WRAP.