La I edición del Concurso Camarero del Año está mostrando la falta que hacía un certamen que pusiera en valor la imprescindible relación que crea el camarero entre el cliente y el establecimiento, su filosofía, su cocina… Este concurso es posible gracias al proyecto, puesto en marcha, por la organización del Concurso Cocinero del Año, uno de los concursos de cocineros con más reconocimiento a nivel nacional.
Con el Concurso Camarero del Año se pretende poner en valor la labor de estos profesionales que en los últimos años han visto su figura ensombrecida, sólo se ha loado al chef, y éste no puede brillar si no está apoyado en un buen servicio de sala. Pero, ¿cómo se desarrolla el Concurso Camarero del Año?.
Pues como os comentamos hace unas semanas, asistimos a la semifinal de este concurso celebrado en Barcelona, teniendo además el honor de ser parte del jurado. En esta semifinal participaban camareros profesionales y estudiantes de hostelería de último ciclo, procedentes de Cataluña, Aragón y Baleares. Juan Antonio Vila se alzó como ganador de la cuarta semifinal del Concurso Camarero del Año 2014, podéis recordar la entrega de premios, con vídeo, pulsando sobre el enlace anterior.
Os prometimos que os mostraríamos también un vídeo que resume el desarrollo de este concurso de camareros, y es el que podéis ver a continuación.
El Concurso Camarero del Año se realiza durante toda una jornada, el conocimiento, la experiencia y el talento de los participantes se pone a prueba con exámenes teóricos y prácticos durante la mañana y la tarde. El concurso empezó con el examen teórico, la corrección de una carta que contiene errores, la cata de la copa negra, el tiraje de cerveza y un maridaje, y la elaboración de un Gin Tonic.
Por la tarde las pruebas que realizaron fueron el montaje de una mesa, la elaboración de un Steak tartar, la simulación de un servicio de mesa para valorar cómo se presenta, las atenciones que proporciona, cómo vende los platos, los vinos, los postres, la copa… y la realización de un maridaje de platos y vinos, sin conocer los platos hasta unos minutos antes de iniciar la prueba.
Resulta muy satisfactorio contemplar la pasión con la que los participantes en esta semifinal realizaban cada una de las pruebas, con más nervios de los que mostrarán en su trabajo en el día a día, seguro, pero esa es otra magia. También nos encantó ver que quien no era profesional, es decir, el participante que estaba en el último curso de formación, tenía unas bases teóricas muy buenas, así como la práctica, buen cimiento para que la labor de camarero se termine de perfilar con la experiencia en un restaurante real. Si todas las escuelas forman así a sus estudiantes, y todos los alumnos tienen vocación, podemos prever que en un futuro cercano, las salas de los restaurantes van a volver brillar.
Ya sabéis que la quinta semifinal del Concurso Camarero del Año se va a celebrar en febrero, y los cinco clasificados participarán en la gran final que se celebrará en Alimentaria 2014. Allí intentaremos estar para conocer en directo a quien se alce con el primer título del Camarero del Año.