La proteína de soja texturizada es una excelente opción para incorporar proteínas vegetales a nuestra dieta, su versatilidad es tan extensa como la de la propia carne, con ella se pueden hacer desde guisos a hamburguesas. Pero antes de cocinarla hay que hidratarla y aquí vais a ver cómo preparar la soja texturizada en 10 minutos, y tenerla lista rápidamente para cocinar.
No puede ser más sencillo, la soja texturizada se hidrata poniéndola en remojo, pero hay algunos detalles que harán que sea más rápido y si es necesario, con más sabor. Pero, vamos por pasos, si no conocéis muy bien qué es la soja texturizada, podéis leer este post en el que os explicamos lo más básico e interesante.
Años atrás no era un ingrediente muy conocido y sólo se podía encontrar en tiendas de dietética y herboristerías. Pero con el creciente interés de la población de llevar una alimentación más saludable y de reducir el consumo de carne sin que falten proteínas en la dieta, entre otras cuestiones, la proteína de soja texturizada se ha convertido en un alimento más disponible en todos los supermercados, además, es un producto económico.
En el vídeo podéis ver el método más simple y rápido para preparar la soja texturizada para hacer, por ejemplo, una salsa boloñesa. Como queremos que absorba todo el sabor del tomate y las hortalizas con las que se cocinará, la hidratamos con agua. Para otras recetas, puede ser más interesante hidratar la proteína de soja texturizada con un buen caldo, pues además de adquirir la deseada hidratación y textura tierna, absorberá su sabor.
El proceso de hidratar la soja texturizada con caldo es el mismo que con agua, sobra decirlo. En cuanto al tiempo necesario para que esté en su punto, recordad que puede variar según lo gruesa que sea la proteína vegetal, ya que en el mercado se puede encontrar soja texturizada de distintas granulometrías: fina o grano pequeño, media o grano medio, gruesa o grano grande, en tiras, en láminas…
Ingredientes (2-4 comensales)
- 100 gramos de soja texturizada
- 500 gramos de agua.
Elaboración
Calienta el agua en una olla hasta que empiece a hervir. En ese momento, viértela en un recipiente amplio en el que está la soja texturizada.
Dale unas vueltas para que no se quede pegada y se hidrate uniformemente, puedes tapar el recipiente si lo deseas.
Pasados cinco minutos comprueba el punto de hidratación de la soja texturizada, dale unas vueltas y deja unos cinco minutos más si es necesario.
Cuando la soja texturizada esté esponjosa y tierna, está lista para cocinar en la receta deseada. Si ha quedado agua sin absorber, puedes escurrirla. Si no vas a gastar toda la soja texturizada hidratada, puedes conservarla para otro momento en el frigorífico, en un recipiente bien cerrado.