No somos pocos los que nos sorprendimos al descubrir cómo hacer zumo de granada, sobre todo si normalmente se ha consumido la fruta directamente en grano. Quien no haya hecho zumo de granada hasta el momento quizá quieran leer este post en el que explicamos que un exprimidor de cítricos es suficiente para extraer el zumo de la granada. No hace falta desgranar la granada e introducir los granos en una licuadora, como alguna vez nos habéis comentado.
Ahora bien, hay otra forma de hacer zumo de esta llamativa fruta que, como sabéis, se compone de una agrupación de semillas jugosas de color rojo rubí, aunque según la variedad su color puede llegar a ser rosado o blanquecino. Y es lo que vais a poder ver en el vídeo que tenéis a continuación, cómo hacer zumo de granada sin un exprimidor, aunque en este caso sí que hay que desgranar la granada previamente.
Pero ya sabemos que esto es tarea fácil, y que hay sistemas para hacerlo para todos los gustos, sin necesidad de disponer de utensilios de cocina específicos. Basta un cuchillo para cortar la granada como si fuera una naranja, por ejemplo, a cuartos, así es muy fácil retirar los granos enteros y separándolos de las membranas que los envuelven, y lo más importante, sin ensuciar apenas la encimera.
Y para quien prefiera otros métodos para desgranar una granada, recordamos que aquí os mostramos una muy popular, que es golpeando media granada sobre un bol para hacer caer las semillas, si se hace bien, tampoco se ensucia la cocina, aunque más de uno se habrá golpeado la mano que sujeta la fruta.
Entonces, ¿qué se necesita para hacer zumo de granada si no se tiene un exprimidor? Pues como veréis en las imágenes a continuación, basta una bolsa con cierre tipo Ziploc y algo para presionar, una mano de mortero, un rodillo, una espalmadera o simplemente una botella que haga las veces de rodillo.
En el vídeo podéis ver que para hacer el zumo de granada, una vez obtenidos los granos de la fruta se deben introducir en la bolsa con cierre ‘cremallera’ y cerrarla, se coloca sobre la mesa de trabajo y se pasa el rodillo presionando para que los granos exploten y salga su jugo, se puede presionar, dar golpecitos… como a cada uno le vaya mejor. Una vez finalizado, para obtener el zumo se realiza un pequeño corte en una punta de la bolsa para que salga el jugo sin nada de pulpa, aunque también se puede abrir la bolsa, para poder reutilizarla, y verter el contenido por un colador.
Y ni se os ocurra tirar el sobrante de la fruta, pues seguirá teniendo sustancia, así que os recomendamos que lo reservéis para hacer, por ejemplo, una vinagreta. Para ello, bastará con introducir lo que ha quedado después de obtener el zumo en el vaso de la batidora con el aceite de oliva virgen extra, un toque discreto de vinagre (por ejemplo, de Módena), pimienta negra sal y listo. Tenéis un aderezo delicioso para cualquier ensalada.