Cómo hacer un crumble con fruta de temporada en 10 minutos, una receta para siempre

Hace unas semanas compartimos con vosotros nuestra receta de crumble de cerezas con la elaboración paso a paso para realizar su cocción en freidora de aire. Aunque la misma receta sirve para hacerla en el horno, de hecho, en Gastronomía y Cía tenéis varias recetas de crumble al horno. La cuestión es que hoy os traemos otra receta para siempre, sirve para recordar la anterior y para que veáis que es una receta muy fácil de hacer con cualquier fruta de temporada.

Así que a continuación os contamos cómo hacer un crumble con fruta de temporada en 10 minutos si la hacéis en freidora de aire, y un poco más si la hacéis al horno. En esta ocasión hemos hecho el crumble con pera, nectarina y nísperos, teníamos que gastar estas frutas y no se nos ha ocurrido una forma mejor para dar la bienvenida al fin de semana. En cuanto a la capa crujiente que es lo que hace la magia de este postre, la hemos preparado con avena y avellana básicamente, os lo detallamos en los ingredientes.

Probad este postre que podría decirse que es un pastel al revés y en lugar de con una masa esponjosa, crujiente. Por cierto, esta rápida cocción de la fruta nos permite disfrutar de ella aún con cuerpo, pudiéndola masticar, pero si os gusta que quede más blandita y un poco acompotada, sólo tenéis que bajar la temperatura de cocción a 180º c y prolongar unos minutos más el tiempo. Ya nos contaréis.

Ingredientes (2 personas)

  • 100 gramos de pera limpia
  • 150 gramos de nectarina (sin piel ni hueso)
  • 50 gramos de níspero (sin piel ni huesos)
  • 1 chorrito de zumo de limón
  • 10 gramos de azúcar (opcional)
  • 15 gramos de harina de almendra muy fina.

Para el crumble
  • 30 gramos de copos de avena
  • 30 gramos de avellanas
  • 25 gramos de azúcar
  • 15 gramos de mantequilla
  • 10 gramos de aceite de avellana.

Elaboración

Como comentábamos, se puede utilizar la cantidad y variedad de fruta de temporada que se desee, para prepararla primero hay que lavarla, pelarla, retirar el hueso o semillas y cortar en trozos un poco más pequeños que un bocado.

Pon la fruta en un bol a medida que la vas cortando y riega con un poco de zumo de limón si lo ves necesario, para que no se oxide. Añade el azúcar para contrarrestar la acidez, pero si utilizas fruta muy dulce, puede no ser necesario añadir el endulzante, así que al gusto.

Espolvorea la harina de almendra de molienda fina (también puedes usar harina de trigo, avena…) sobre la fruta para que absorba la humedad, mezcla bien y pasa la fruta a una fuente o molde que sea apto para la freidora de aire.

Para preparar el crujiente del crumble, mezcla en un bol la avena, las avellanas, el azúcar, la mantequilla a temperatura ambiente y el aceite de avellana. Trabaja con las manos para que la grasa impregne bien los ingredientes, los amalgame un poco y su sabor quede repartido, que también es clave en la elaboración de un crumble.

Cubre la fruta con este preparado de avena y avellanas haciendo una capa fina y homogénea, e introduce el molde en la cesta de la freidora de aire. Programa 200º C 8-10 minutos, depende del dispositivo, igual que sucede con los hornos y los microondas.

Lo ideal es que cuando hayan pasado unos seis minutos compruebes cómo va la cocción, ya que una vez que la cobertura de este postre esté dorada, el crumble estará listo. Entonces, retíralo de la freidora de aire y deja que pierda un poco de temperatura antes de servir, o deja enfriar.

Acabado y presentación

Puedes servir el crumble de peras, nectarinas y nísperos templado o frío, y aunque sólo ya está delicioso, puedes completar el postre con una bola de helado, con crema pastelera, con yogur griego o con nata montada. Tus comensales lo van a gozar. ¡Buen provecho!

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