Hacer späetzle en casa es rápido y muy fácil, la preparación de la masa requiere poco tiempo, y después se les da forma con la prensa para späetzle siendo algo tan simple y agradecido que hasta los niños querrán colaborar en la cocina. La cocción es también muy rápida, así que podemos preparar unos späetzle en media hora y disponer así de una guarnición o base para una receta muy versátil.
Ya os habíamos avisado de que muy pronto os íbamos a mostrar cómo hacer späetzle, quizá ya os habéis acercado a vuestra tienda de menaje de cocina para comprar el utensilio que os mostramos, pues cuando pongáis en práctica la elaboración casera de späetzle estamos seguros de que vais a repetirla muchas veces, siempre y cuando después los cocinéis con ingredientes que le proporcionen sabor, pues esta preparación básica lo principal que ofrece es textura y por supuesto, una interesante fuente de carbohidratos.
Ingredientes
- 325 gramos de harina de trigo
- 3 huevos (L)
- nuez moscada (opcional)
- sal
- 200 gramos de agua caliente aproximadamente.
Elaboración
Pon en un cuenco amplio la harina tamizada, añade los huevos (puedes añadirlos ligeramente batidos), nuez moscada al gusto y sal. Añade a continuación, poco a poco, mientras vas mezclando con una espátula o lengua de silicona, el agua caliente.
La cantidad de agua necesaria puede variar según la harina que se use, cada una tiene un nivel de absorción aunque sea harina normal de trigo. Debes obtener una masa que sea más densa que para hacer crepes, que al levantarla con la cuchara tarde en caer. Deja reposar unos minutos, la harina se hidratará más y la masa se hará algo más densa.
Pon una olla a calentar y cuando rompa a hervir añade sal, prepara la prensa para späetzle con el disco de agujeros grandes y separados. La prensa se puede apoyar sobre la olla para poder verter la masa en el recipiente de la prensa.
Llénalo rápidamente, quizá te resulta más fácil si pasas la masa a una jarra con pico vertedor, a continuación prensa para que la masa salga rápidamente formando hilos que se irán rompiendo al caer en el agua, se irán al fondo.
Pasados unos segundos, mueve los späetzle para que no se peguen y cuando vayan subiendo a la superficie, cuando floten, retíralos con un colador o una rasera para escurrirlos y deposítalos en un plato.
Repite la operación hasta terminar con la masa, y los späetzle caseros estarán listos para condimentarlos o preparar la receta que desees con ellos. Es fácil ¿verdad?, pues además es un excelente alimento, así que a disfrutarlo.