Os hemos preparado un aperitivo o picoteo que os va a encantar para este fin de semana, os explicamos cómo hacer snacks de alga nori y sésamo en 15 minutos, es una receta fácil y rápida de hacer y el snack queda crujiente y sabroso. Lo malo es que no pararías nunca de comerlos, el segundo bocado está más rico que el primero, y así…
Estos snacks o crujientes de alga nori y sésamo son perfectos para tomar solos con cualquier bebida, desde un té a un refresco, una copa de vino blanco o una cerveza, pero también son ideales para servir con salsas o patés que armonicen con el sabor del alga y el sésamo, que como veréis, tienen un toque dulce y umami. Tomad nota que os esperamos en la cocina.
Ingredientes
- 30 gramos de miel o sirope de arce
- 15 gramos de salsa de soja
- 4 hojas de alga nori
- c/n de semillas de sésamo.
Elaboración
Vierte en un pequeño bol la miel o el sirope de arce y la salsa de soja, mezcla bien y reserva. Dispón cuatro hojas de alga nori sobre la mesa de trabajo y pincela las cuatro con esta preparación de miel/arce y soja.
En dos de las algas nori pinceladas con el sabroso aderezo, reparte las semillas de sésamo, preferiblemente que estén recién tostadas y así su aroma y sabor será más potente.
Coloca sobre el alga nori con sésamo otra hoja de alga nori pincelada y presiona bien para que quede adherida, puedes utilizar un peso, un rodillo o simplemente las manos.
Puedes hacer el crujiente de alga nori y sésamo en el horno calienta a 120º C, en unos 15 minutos puede estar listo. Nosotros lo hacemos en la freidora de aire, también a 120º C pero está listo en 8-10 minutos.
Para que el alga nori no suba con el aire de la freidora de aire, conviene poner un peso encima, como una pequeña rejilla (lo verás en el vídeo). A mitad de cocción, es decir, pasados los primeros cuatro o cinco minutos, da la vuelta al alga nori para que esté igual de crujiente por los dos lados.
Acabado y presentación
Al retirar el snack de alga nori del horno o la freidora de aire no estará tan crujiente como cuando se enfríe, colócalo sobre una rejilla con ese fin. Una vez frío, corta cuadros para conseguir los deliciosos snacks para comer en dos o tres bocados. Cuidado, porque crean adicción. ¡Buena cocina y buen provecho!