De los tres tipos de merengue que os mostramos en el post Merengue básico, merengue italiano y merengue suizo, hoy vamos a ver concretamente cómo hacer merengue italiano, quizá es uno de los más utilizados en repostería, son muchas las recetas dulces que requieren de esta preparación entre sus ingredientes, un par de ejemplos que encontraréis en Gastronomía y Cía es la Crema de mantequilla y la Crema Chiboust de naranja, pero hay muchas más, y también las iremos viendo.
El merengue italiano se encuentra entre los denominados merengues cocidos, pues como sabéis, además de montar las claras firmes, se añade almíbar recién hecho, este calor se transmite a las claras montadas, pero no alcanza demasiada temperatura, al menos no la suficiente como para terminar con las bacterias de la salmonella, un dato que hay que tener en cuenta. Su elaboración es muy sencilla, y con buenos utensilios para montar las claras, es además muy rápida, así que a continuación podéis tomar nota sobre cómo hacer merengue italiano.
Ingredientes
- 220 gramos de clara de huevo
- 50 gramos de azúcar.
Para el almíbar
- 150 gramos de azúcar
- 50 gramos de agua.
Elaboración
En primer lugar pesa todos los ingredientes, pon el azúcar con el agua en un cazo de fondo grueso y llévalo al fuego a temperatura media-alta. Puedes dejar que se vaya haciendo el almíbar mientras montas las claras para hacer el merengue. El almíbar estará listo cuando alcance los 120º C.
Hay distintas formas de hacer lo que sería el merengue básico, que es con el que se parte para hacer este merengue italiano, al batir las claras se añade azúcar. Se puede incorporar una vez que se han montado, pero el método francés, que facilita la labor y además de excelentes resultados, es poner en el recipiente el azúcar y las claras a la vez. Pruébalo.
Bate con las varillas eléctricas hasta que las claras estén firmes, para entonces el almíbar ya estará listo, así que empieza a incorporarlo a hilo, lentamente y sin dejar de batir con las varillas, hasta obtener un merengue fino y brillante, esponjoso y con cuerpo. Volcando el recipiente comprobarás que está rígido, no se mueve.
El merengue italiano se conserva bien hasta un par de días, siempre que se guarde en el frigorífico y bien tapado. También se conserva bien estando presentado en un postre, pero del mismo modo, conviene que esté a una temperatura adecuada en el refrigerador.
Si os surge cualquier duda al respecto de cómo hacer merengue italiano, podéis dejar vuestra consulta en los comentarios.