Colines integrales con sésamo

Además de las Galletas de Inca, siempre están en nuestra despensa los Colines integrales con sésamo, son dos tipos de panecillos tostados y crujientes que nos encantan para comer algo entre horas o para acompañar algunos dips o salsas para mojar, tabla de quesos o embutidos e incluso con la ensalada nos encantan.

A menudo hacemos nuestros colines integrales, es de lo más sencillo, salen riquísimos y lo mejor, es que sabemos qué estamos comiendo. En más de una ocasión nos hemos llevado sorpresas al leer las etiquetas de los alimentos, como ejemplo os pondremos en otro post una comparativa que hicimos sobre los valores nutricionales de unos colines y los donuts. Así que manos a la obra, y a hacer colines caseros.

Ingredientes

  • 350 gramos de harina integral panificable
  • 190 gramos de agua
  • 50 gramos de aceite de oliva virgen extra
  • 15 gramos de levadura de panadero
  • 10 gramos de sal
  • 30 gramos de sésamo.

Elaboración

Pon la harina en un cuenco o en el recipiente de la amasadora, disuelve la levadura en el agua tibia e incorpórala a la harina, añade también el aceite de oliva y la sal. Si amasas a mano, incorpora también las semillas de sésamo, si lo haces con Thermomix añádelas uno o dos minutos antes de finalizar el amasado, pues aunque a velocidad espiga, las cuchillas rompen las semillas.

Amasa durante 6-8 minutos, hasta obtener una masa homogénea y algo elástica. Haz una bola con ella y ponla en un cuenco engrasado con aceite de oliva, cubre con el paño que siempre utilizas para los levados del pan y deja que doble su volumen.

Precalienta el horno a 180º C. Llegado el momento, vuelca la masa en la superficie de trabajo y desgasifícala, corta porciones y amasa haciendo tiras cilíndricas largas y finas, piensa que después aumentarán de tamaño. Corta cada tira con el largo que desees dar a los colines y ve depositándolos en la bandeja del horno, harán falta dos bandejas.

Hornea los colines durante 25 minutos aproximadamente, dependerá del tamaño que les hayas dado. Quedarán dorados por fuera y crujientes por dentro. Cuando los retires del horno, déjalos enfriar sobre una rejilla.

Ya puedes guardar tus colines con sésamo en un tarro o en una bolsita, si es que no os los coméis antes. Y prueba también los Palitos con sésamo y anís o los Grisines de aceite de oliva. ¡Buen provecho!

Artículos relacionados