El próximo 1o de enero de 2009 entrará en funcionamiento el nuevo Código de Autorregulación Publicitaria del Vino, medida que ha adoptado la Federación Española del Vino que se enmarca en el plan europeo “Vino con moderación”. Se trata de un código que será aplicado a todas aquellas bodegas que pertenezcan a la federación, pudiéndose adherir a él cualquier bodega u organismo que lo desee y que no esté dentro de la asociación.
El Plan del Vino pretende promover el consumo moderado de vino y desmarcarse del consumo de otras bebidas alcohólicas, la idea es auto imponerse una ética que permita garantizar un comportamiento adecuado de las marcas y bodegas a través de los medios de comunicación. Además, cada bodega inscrita en la Federación Española del Vino, mostrará su adhesión al Código de Autorregulación Publicitaria mediante la inclusión de un enlace en su página web del programa “Vino con moderación”.
Accediendo a Wine in Moderation podemos conocer el programa completo de esta iniciativa y sus objetivos, cómo se debe promover el consumo de vino y productos vitícolas de forma responsable, cómo fomentar el mensaje del vino como producto de primera calidad, qué riesgos sociales y sanitarios encierra el consumo excesivo de vino, cómo se debe fomentar el cambio cultural del enfoque del consumo de alcohol buscando que se implante como una moda la moderación, etc. Pero lo mejor para conocer con más detalle este programa es acceder al Pdf Mensaje Común de la web, en él se ofrece una visión detallada del programa mostrando el nivel de compromiso del sector europeo del vino en la promoción de la moderación y el consumo responsable.
El Código de Autorregulación Publicitaria del Vino indica que los mensajes publicitarios no pueden animar en ningún caso a un abuso del vino o un consumo irresponsable, tampoco podrán ser destinados a los menores y se debe evitar la asociación entre consumo y madurez. No podrá asociar el consumo de vino con la conducción o dar la impresión de que beber vino mejora la capacidad física o mental.
No se podrán utilizar las particularidades saludables del vino orientando su consumo a tratar o prevenir algunas enfermedades, como por ejemplo, las investigaciones que demuestran que su contenido en resveratrol o polifenoles. Entonces, investigaciones como la que intenta desarrollar vinos con altos niveles de resveratrol y quercitina no tendrían razón de ser, ya que están asociando el consumo de vino con la salud de un modo indirecto.
En ningún caso se debe reivindicar el consumo de vino como un modo para superar algunos de los problemas que afectan a la sociedad a nivel social o saludable y mucho menos mostrar la relación vino distinción o éxito social, tampoco se debe relacionar la abstinencia de beber vino con un fracaso social en cualquier ámbito.
Autocontrol (Asociación para la Autorregulación de la Comunicación Comercial) será el organismo responsable para verificar que las empresas adheridas al código lo siguen al pie de la letra y, en el caso de producirse alguna irregularidad, también será el organismo competente para solucionar el problema y aplicar las resoluciones oportunas que deberán acatar las empresas adheridas.
¿Por qué no se plasman medidas de características similares en el resto de bebidas alcohólicas, Vodka, Whisky, etc.? Los datos muestran que cada vez se reduce más el consumo de vino y además se está demonizando la bebida, podemos recordar una encuesta realizada en Francia, cuyos resultados indicaban que en ese país de cuna enológica el vino se considera peligroso por una buena parte de la población, algo incluso asombroso, sin embargo, no se habla del resto de bebidas alcohólicas tal y como se habla del vino.
Vía | El Economista