En los últimos años hemos conocido iniciativas como la de apadrinar una vaca, el consumidor realizaba una inversión en un animal, que recuperaba en especies como leche, yogures, queso, etc., o apadrinar un olivo, proyecto para transformar el estado de abandono del medio rural de un modo sostenible mediante una inversión en olivos centenarios, y el consumidor obtenía a cambio aceite, la posibilidad de visitar el olivar, etc.
Hoy conocemos un proyecto similar llevado a cabo en Lombok, una isla de Indonesia que sufrió fuertes terremotos el año pasado, provocando serias pérdidas humanas y materiales. Parece ser que los miles de cocoteros de la isla lograron resistir estas fuerzas de la naturaleza, algo que han aprovechado Danica, Marta y Pak Raden, tres activistas que estaban ayudando a la comunidad local y decidieron poner en marcha Coconesia, un proyecto que ofrece la posibilidad de apadrinar una palmera y recibir productos derivados del coco.
El objetivo del proyecto es restaurar en la isla la producción de cocos para elaborar aceite de coco virgen orgánico y otros productos derivados, con ello, se proporciona un medio de vida y se contribuye en la recuperación económica. Coconesia se ha creado como proyecto que combina la pasión de la creación y el deseo de retribuir y ayudar a la comunidad local, basado en una iniciativa anterior puesta en marcha en 2016, donde un grupo de mujeres, empezaron a trabajar en la producción de aceite de coco virgen orgánico, producto que, en su momento ayudó a mejorar la economía local.
El aceite de coco recibió todos los certificados que confirman su calidad, valor nutricional, el carácter ecológico y sostenible del proyecto, etc. El terremoto truncó esta actividad al destruir las instalaciones, la maquinaria y las herramientas, por lo que era imposible volver a poner en marcha la producción. Aquí es donde entra en juego Coconesia, el proyecto tiene el cometido de recaudar fondos para la compra de la maquinaria, la reconstrucción de las instalaciones comunitarias para la elaboración del aceite y otros productos, etc.
El proyecto trabaja con las palmeras y sus cocos situados en North Lombok (norte de la isla), ofrece la posibilidad de que quienes quieran ayudar, se conviertan en “dueños” de una palmera, al apadrinarla se recibe a cambio un certificado personalizado y productos que se han elaborado con sus cocos. La producción se basa en la filosofía ‘cero residuos’ y se aprovecha todo, se recicla el 100% de todo lo que se obtiene de las palmeras y sus frutos. Además del aceite, se elabora azúcar, coco rallado, cuencos, cubiertos, etc., todo son productos 100% naturales, orgánicos y elaborados con métodos tradicionales y artesanales.
El proyecto se ha presentado en la en la plataforma de micromecenagzo Kickstarter, donde se solicitan casi 10.000 euros para poder ponerlo en marcha, se ofrecen varias modalidades de contribución, siendo la mínima de unos 18 euros para poder recibir productos de coco y ser padrinos de una palmera, pero a mayor cantidad invertida, mayor será el número de recompensas o especies recibidas (que se envían a cualquier parte del mundo). Pero lo interesante del proyecto es el hecho de facilitar a una comunidad, que pueda salir adelante con su esfuerzo y trabajo, y también con un poco de ayuda.
En el vídeo sobre estas líneas podéis ver la presentación de Coconesia, y para conocer más detalles del proyecto, os recomendamos visitar la página de Kickstarter.