Una coalición internacional de consumidores contra el fast food lanza un llamamiento al mundo, la razón es el aumento del sobrepeso y obesidad. Los medios de comunicación son los más utilizados para dar a conocer un producto, la alimentación es algo que se encuentra muy presente en las cadenas televisivas e influye notablemente en la decisión de muchos consumidores. Numerosos estudios muestran, por ejemplo, que los niños se sienten tentados por los productos que se anuncian, especialmente aquellos en los que los alimentos se acompañan de juguetes, personajes infantiles, payasos, etc.
El grupo internacional de consumidores acaba de poner en marcha una campaña para intentar que se limite la publicidad de estos productos en las emisiones televisivas, en internet o en cualquier medio de comunicación. La idea es alejar de los pequeños estos alimentos no recomendables, por ello, más de 50 organizaciones han reclamado acciones efectivas y solicitan a los gobiernos del mundo que se empiece a utilizar una reglamentación que impida que el fast food pueda ser publicitado sin control y a cualquier hora del día.
Podemos recordar que no hace mucho tiempo se solicitaba en México incluir advertencias nutricionales en los envases y envoltorios de los alimentos que ofrecen en los fast food para intentar concienciar a la población mexicana sobre lo peligroso que resulta abusar de estos productos.
Esta iniciativa también se ha realizado en otros países, en Estados Unidos por ejemplo, de ello hablábamos en este post titulado Fast foods norteamericanos con leyenda calórica obligada a partir de marzo. Por desgracia, son iniciativas escasas que no terminan de frenar el problema y es que mucho tiene que ver la educación y el nivel socioeconómico, especialmente en aquellos países donde abunda la pobreza.
En el caso de los países industrializados, si existen medidas efectivas, una sería implantar la asignatura de nutrición en las escuelas e impartir educación nutricional a los padres. La medida que propone la coalición internacional de consumidores resulta también interesante, especialmente para poder frenar lo que actualmente se tacha de epidemia del siglo XXI, el sobrepeso y la obesidad.
La coalición pretende que no se utilicen dibujos o personajes infantiles para anunciar este tipo de productos no recomendables para el buen desarrollo de los niños (tampoco recomendable para los adultos). El nuevo código publicitario será propuesto en la próxima asamblea de la OMS (Organización Mundial de la Salud). Es una gran iniciativa que se verá frenada por los intereses económicos, aunque quién sabe, quizás realmente empiecen a cambiar las cosas.