Hay tantas formas de acompañar nuestros platos con guarniciones o preparaciones sabrosas, nos encantan cuando son muy aromáticas y están bastante especiadas, combinando con ingredientes que le aportan suavidad. Esto sucede por ejemplo con el chutney, que lo hacemos más a menudo con frutas que con verduras. El último que preparamos fue este Chutney de peras, higos y almendras.
Con esta receta de chutney acompañamos una tabla de quesos, ¿o fue al revés?. La verdad es que el orden de los valores no importa, pues tanto los distintos quesos como el Chutney de peras, higos y almendras son protagonistas de un bocado exquisito.
Ingredientes
- 350 gramos de peras maduras pero firmes
- 65 gramos de higos turcos
- 40 gramos de almendra marcona cruda y pelada
- 60 gramos de cebolla
- 25 gramos de raíz de jengibre
- 60 gramos de vinagre de manzana
- 65 gramos de azúcar moreno
- 45 gramos de agua
- 1 trocito de macis
- 4 clavos de olor
- ½ c/c de pimienta negra recién molida
- ½ c/c de canela molida
- 1 guindilla fresca (poner el pimiento picante que se desee y la cantidad al gusto)
- 5 gramos de sal
- aceite de oliva virgen extra.
Elaboración
Pela y corta en brunoise la cebolla y los higos turcos, pela el jengibre y córtalo en dos o tres trozos, despepita la guindilla, y pela las peras, córtalas antes de incorporarlas a la cazuela en daditos.
Pon una cazuela pequeña al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra, caliéntalo a fuego moderado y añade las almendras, tuéstalas ligeramente e incorpora la cebolla, el jengibre y los higos, cocina a fuego lento, añadiendo la guindilla, los clavos, la pimienta, la canela, la sal y el azúcar, hasta que la cebolla esté tierna.
Finalmente incorpora las peras, el vinagre y el agua y lleva a ebullición. En este momento, reduce el fuego y deja cocer a baja temperatura y con la tapa puesta sin encajar, durante unos 40 minutos o hasta que la cocción de la fruta esté a tu gusto. Recuerda mover el chutney de peras de vez en cuando con una espátula.
Una vez preparado el Chutney de peras, higos y almendras, puedes dejarlo enfriar a temperatura ambiente y después guardarlo en el frigorífico en un tarro de cierre hermético, se conservaría varios días, y a cada día que pasa gana en sabor, pero está tan rico que se termina muy pronto.