Nos encanta el carpaccio, y nos gustó mucho la presentación que Sonia nos mostró en su blog, así que no hemos tardado en preparar el Carpaccio con vinagreta de mostaza para deleitar a nuestros comensales, y por supuesto, para disfrutar nosotros. Es prácticamente la misma receta, aunque hemos añadido el praliné salado de sésamo tostado con el que muchas veces acompañamos el carpaccio.
La elaboración de esta receta de carpaccio es muy sencilla, y puede cumplir la función de aperitivo o entrante según la cantidad que se sirva. De lo que no hay duda es que los platos quedarán limpios, sin rastro alguno de lo que se posaba en ellos antes de llevarlos a la mesa.
Ingredientes (4 comensales)
- 200 gramos de carpaccio de ternera
- rúcula
- queso parmesano
- piñones
- cebollino.
Vinagreta de mostaza
- 30 gramos de aceite de oliva virgen extra
- 10 gramos de vinagre de Jerez
- 15 gramos de mostaza
- pimienta negra
- sal.
Praliné salado de sésamo
- 50 gramos de semillas de sésamo
- 20 gramos de aceite de sésamo (o girasol)
- sal.
Elaboración
Con anterioridad hay que preparar el praliné salado de sésamo, con las cantidades indicadas tendrás para otras recetas. Pon una sartén con las semillas de sésamo a fuego moderado y tuéstalas, moviéndolas de vez en cuando. Una vez que estén tostadas, pásalas al molinillo o utensilio que vayas a utilizar para triturarlas, añade el aceite y tritura hasta obtener una pasta tipo praliné, añade una pizca de sal y reserva.
Prepara la vinagreta, mezcla todos los ingredientes que la componen y bate hasta emulsionar, con un tenedor, unas varillas… no en la batidora. Reserva. Tuesta los piñones en una sartén sin engrasar, moviéndolos de vez en cuando y a fuego moderado para que se tuesten de forma homogénea.
Escalda el cebollino unos segundos en agua caliente para poder atar con él los saquitos, corta el queso parmesano en lascas, prepara la rúcula y extiende las láminas de carpaccio en la mesa de trabajo bien limpia.
Con ayuda de un pincel, pinta cada lámina de carpaccio con la vinagreta de mostaza, pon en el centro unos piñones y unas lascas de parmesano, forma unos saquitos conservando el relleno en el interior y ciérralos con el cebollino, sin apretar para que la carne no se rompa.
Emplatado
Pinta la base del plato con el praliné salado de sésamo, reparte la rúcula en un lado y coloca los saquitos de carpaccio sobre ésta y sobre el praliné. Termina aderezando la rúcula con un poco de vinagreta y sirve enseguida. ¡Buen provecho!