Un grupo de investigadores holandeses ha logrado desarrollar carne de cerdo in vitro, es decir, carne cultivada desarrollada a partir de células de un cerdo vivo en placas de Petri (recipientes de plástico o cristal utilizados en la investigación bacteriológica). El descubrimiento nos recuerda la propuesta realizada por la Organización Gente para el Tratamiento Ético de los Animales, ofrecían un millón de dólares a quien desarrollara carne de pollo in vitro con la máxima calidad y un coste de producción competitivo.
Como ya indicamos anteriormente, no pasarán muchos años para que podamos adquirir en los supermercados varios tipos de carne, tradicional, ecológica, transgénica, clonada o como es el caso, carne de laboratorio o cultivo. Los científicos holandeses indican que la carne de cerdo in vitro o de laboratorio contribuiría a reducir significativamente la emisión de gases de efecto invernadero (metano) producido por los cerdos, recordemos que precisamente hoy hablábamos de los problemas del cambio climático relacionados con la producción cárnica en el post Ovejas más saludables para el medio ambiente. Curiosamente y según los datos ofrecidos en este post, los cerdos son uno de los animales que menos emisiones de metano realizan, hubiera sido interesante entonces desarrollar carnes vacunas u ovinas por este sistema.
Los investigadores se plantean la siguiente pregunta, ¿estarían dispuestos los consumidores a comer carne producida en los laboratorios?, sería cuestión de realizar las consultas oportunas y ofrecer degustaciones para que valoraran esta posibilidad. Volviendo a la noticia, los especialistas obtuvieron la carne de cerdo de laboratorio a partir de la extracción de células musculares de un cerdo vivo, concretamente mioblastos, un tipo de células progenitoras que según se indica en Wikipedia, se parecen a las células madre pero con la particularidad de que sólo pueden dividirse un número limitado de veces.
Estas células están programadas para hacer crecer los músculos o sustituir a las células dañadas en los animales. El cultivo se inició en las placas de Petri utilizando una solución con nutrientes que estimulaban la división celular de forma indefinida. En principio, esta solución está formada por elementos provenientes de la sangre fetal de los animales pero los investigadores indican que pretenden lograr los mismos resultados utilizando una solución de nutrientes sintética o de laboratorio.
Los primeros resultados han dado lugar a un tipo de carne que posiblemente no sería del agrado del consumidor, carne muscular pegajosa y blanda dado que no ha sufrido el proceso de ejercicio y fortalecimiento que tiene lugar en los cerdos. Esto indica que no sólo hay que desarrollar la carne, también someterla a un proceso de tensión para que adquiriera una textura similar a la que ofrece la carne de cerdo.
Retomando La información del post Carne de pollo in vitro, debemos recordar que ya mencionamos la investigación holandesa desarrollada por los expertos de la facultad de veterinaria de la Universidad de Utrech, esta se iniciaba hace algo más de dos años. Los resultados llegan ahora, una carne que deberán someter a determinados tratamientos para que pueda ser comercialmente viable. Los expertos destacan como beneficios interesantes la preservación del medio ambiente frenando el cambio climático al reducirse la producción de cerdos, o la eliminación del sufrimiento animal entre otros.
Son muchas las pruebas que se deberán realizar sobre la carne de laboratorio, cualidades organolépticas, textura, cómo afectará la ingesta de esta carne al ser humano… problemas que los científicos vaticinan superar sin complicaciones. Ya se está pensando en desarrollar otros tipos de cultivo con otros alimentos, como por ejemplo filetes de pescado, carne de cordero, de vacuno y lo que se les ocurra.
Detrás de la carne de cerdo de laboratorio se encuentra un fabricante de salchicha y una subvención de dos millones de euros por parte del Gobierno holandés, una clara apuesta de futuro que ya veremos cómo será aceptada entre los consumidores. Según la noticia publicada en Times on Line, los grupos de derechos pro animales indican que si la carne no proviene de un animal muerto no pondrán objeción alguna a su comercialización. Pero ¿cómo se garantizará si la carne que se comercialice proviene de un animal sacrificado o de un cultivo de laboratorio?, lo sabremos en su momento.
Foto | Max xx