Recientemente hablábamos de la presentación de los candidatos al Premio a la mentira publicitaria más insolente del año (Goldener Windbeutel), un particular concurso impulsado por la organización alemana de consumidores Foodwatch, cuyo galardón se otorga a aquel producto alimentario cuyas prácticas publicitarias se consideran fraudulentas. Como cada año, se han presentado cinco candidatos que destacan por reunir las condiciones para recibir este premio, y son los consumidores los que deben votar para designar al ganador.
Hoy conocemos otra iniciativa muy similar puesta en marcha por Foodwatch Francia, pero centrada en los productos alimenticios que se presentan como ideales para disfrutar de un magnífico menú navideño. La organización ha presentado los candidatos al Premio a la mentira publicitaria navideña más insolente del año 2021, se trata de cinco productos que se presentan de un modo pomposo, pero que son un fraude al consumidor y que son merecedores de ganar la Casserole d’Or 2021 (Cazuela de Oro 2021).
Foodwatch Francia ha designado como productos merecedores de la Cazuela de Oro 2021 al Caviar de Lumpfish de Nordland, la Cebolla Confitada de Labeyrie, los Daditos de Salmón Deluxe de Lidl, el Foie Gras de Pato que comercializa E. Leclerc y el Refresco de Melocotón y Albaricoque Oasis. Hasta el próximo 21 de diciembre los consumidores podrán votar por uno de estos cinco productos, posteriormente se designará al ganador y se intentará entregar el premio, pero como ocurre casi siempre con el Goldener Windbeutel, la empresa galardonada evitará recibir el preciado galardón.
Ahora conozcamos un poco más los productos que han sido nominados:
Caviar de lumpfish de Nordland: Las huevas se presentan en un elegante tarro que combina negro y plata otorgándole una imagen gourmet, además se anuncia como un producto procedente de la pesca sostenible. Se trata de huevas de lumpo que se tiñen de rojo o negro y se comercializan como sucedáneo de caviar a nada menos que 54’50 euros el kilo. La organización de consumidores comenta que el producto, además, está cargado de aditivos como el E150d (Caramelo Amónico de Sulfito), un colorante del que se sospecha que puede ser cancerígeno. También contiene el conservante E211 (Benzoato de Sodio), y en personas sensibles puede provocar alergias, picor, hinchazón, etc. En definitiva, no se trata de un producto gourmet ideal para disfrutar estas Navidades.
Cebolla Confitada de Labeyrie: Es un producto que se anuncia como especial para acompañar el foie gras y, de hecho, se comercializa en los supermercados junto a este alimento. Foodwatch Francia comenta que ahí es donde opera la magia del marketing navideño, ya que una simple cebolla confitada colocada en un lugar estratégico, se vende a un precio de entre 30 y 40 euros el kilo, cuatro veces más cara que productos homónimos que se comercializan todo el año.
Daditos de Salmón Deluxe de Lidl: En este caso se denuncia el tamaño del envase en relación al contenido, un gran y lujoso envase con firma Deluxe, y una pequeña ventanita que deja ver el producto. El 63% del envase esta vacío y camuflado en el embalaje exterior de cartón, ideal para explicar a los responsables, cómo evitar el derroche de materias primas y generar un mayor volumen de desperdicio en beneficio del medio ambiente, además, estos envases sobredimensionados son una decepción para los consumidores, algo de lo que ya hablábamos en este post.
Foie Gras de Pato E. Leclerc: La cadena francesa de supermercados E.Leclerc comercializa este foie gras de la marca Pierre de Chaumeyrac junto a una caja con chutney de higos y nueces, los envases muestran su carácter gourmet, ideal para disfrutar en las fiestas navideñas. Varios sellos pretenden acreditar que es un producto selecto y excepcional, sin embargo, el producto contiene nitrito de sodio (E250), recordemos que se trata de conservante y fijador de color en las carnes y derivados que algunos estudios han vinculado al mayor riesgo de sufrir cáncer colorrectal. Por supuesto, y como ocurre con todos los productos cuyo marketing se orienta a las festividades navideñas, su precio es elevado.
Refresco de Melocotón y Albaricoque Oasis: Para la organización de consumidores lo más llamativo de este producto indicado para la población infantil, es que contiene aceite de palma. La marca manifiesta su compromiso con el medio ambiente asegurando que sus envases son 100% reciclables, que el producto contiene fruta y agua de gran calidad, pero también contiene otros aditivos y colorantes. A todo esto hay que añadir que el aceite de palma es un producto que Foodwatch Francia asocia a la deforestación y a la desaparición de los orangutanes.
La realidad es que hay productos que son escandalosamente más fraudulentos que los nominados, recordemos, por ejemplo, que hay quien cree comprar foie gras de pato y en realidad en el tarro sólo hay un 20% de este producto, el 80% restante se completa con otros ingredientes como, por ejemplo, la carne o hígado de cerdo. Podemos encontrar crema de bogavante que sólo contiene un 0’5% de este crustáceo, unos tortellini de trufa que únicamente contienen un 0’005% de trufa… la lista es interminable.
Lamentablemente, en esta época del año se incrementa el número de #EtiquetasTrampa, etiquetas deshonestas de los productos alimenticios que confunden y hacen pagar precios exagerados a los consumidores. Como hemos comentado en otras ocasiones, sería interesante que este tipo de iniciativas se llevaran a cabo en nuestro país, sería un modo de concienciar a los consumidores y presionar a las empresas para que abandonen estas prácticas desleales. Podéis conocer todos los detalles del Premio a la mentira publicitaria navideña más insolente del año 2021 a través de la página oficial de Foodwatch Francia.
