Nos encanta el pan recién hecho, ¿verdad? Tanto si lo hacemos en casa como si lo cogemos recién horneado en la panadería, es difícil resistirse a coger un pellizquito, o dos… También nos gusta cuando preparamos pan tostado para el desayuno o para servir como aperitivo en una comida, que todavía esté caliente. El pan es un alimento básico que reconforta (aunque no lo parezca), y cuando está caliente parece que aún nos gusta más, ¿por qué no servirlo así habitualmente?
Seguramente conocéis alguna panera que mantiene el calor del pan, en Gastronomía y Cía conocemos esta panera térmica, pero hay otros sistemas para servir el pan caliente, un ejemplo es el que podéis ver en la foto que ilustra estas líneas, se llama Terra Cotta Bread Warmer y es un calentador de pan para el servicio.
Se trata de una pieza de terracota con un grabado que lo relaciona con su funcionalidad, tiene unas medidas de 12’7 x 7’6 centímetros y se utiliza simplemente colocándolo en la panera en la que se sirve el pan protegida con un paño.
Claro, antes hay que calentar la ‘piedra’ y para ello se puede utilizar el horno, una tostadora, una barbacoa… Garantizan que con el calentador de pan se puede disfrutar de este alimento caliente durante toda la comida. Sobra decir que no sólo servirá para el pan, también para cualquier producto horneado que queramos servir caliente, unos croissants caseros, unos muffins o simplemente unas tostadas.
Esta pieza de terracota grabada es económica, se puede encontrar aquí por unos 6 euros (y en otras tiendas online la hemos visto por 7 y por 9 euros), pero quizá conocéis a algún artesano que os pueda hacer una pieza similar para servir y mantener vuestro pan caliente. ¿Qué os parece la idea?