Cada vez las cocinas caseras cuentan con más utensilios y electrodomésticos que se acercan a las herramientas que se utilizan en las cocinas profesionales, uno que está en nuestro punto de mira es el horno de vapor, y otro que se presenta como muy recomendable es el cajón calientaplatos.
Al querer desarrollar en nuestra cocina las elaboraciones culinarias cada vez más perfectas, en puntos de cocción, texturas, creatividad, etc., se hace casi indispensable el contar con los utensilios que nos faciliten la labor. Y ahí están los fabricantes, desarrollando la tecnología industrial para las cocinas caseras.
La oferta de cajones calientaplatos es cada vez mayor, así también se encuentra más variedad de características, calidad y precios. Gracias a esta excelente tecnología, podremos calentar nuestras recetas emplatadas sin apenas modificar sus cualidades o mantenerlos a una temperatura adecuada mientras terminamos de preparar el menú.
También se le pueden dar otros usos, como descongelar, fermentar masas con levadura, y naturalmente, calentar los platos para que al servir la elaboración no sufra el impacto del frío y se mantenga caliente por más tiempo. La temperatura que ofrecen los cajones calientaplatos es regulable y va de los 30º a los 80º C.
Las nuevas cocinas que ofrecen los diseñadores y fabricantes, ya suelen incorporar esta opción, y como marcan las tendencias, suelen ser de acero inoxidable. El precio varía también según el fabricante y la calidad, los cajones calientaplatos más económicos que hemos encontrado hasta el momento, se encuentran en IKEA por unos 200 euros. Interesante de este calientaplatos es que es totalmente extraíble.
Otras marcas de electrodomésticos más conocidas, ofrecen sus cajones calientaplatos por unos precios más elevados, de 300 a 500 euros, distintas medidas y características para que cada uno encuentre la más adecuada a sus necesidades.