Frito-Lay, empresa dedicada a la comercialización de aperitivos, ha lanzado al mercado estadounidense un nuevo producto que ha sorprendido y no precisamente por su sabor, sino por su envase. Bajo la marca ‘Tostitos’, ha presentado la primera bolsa de chips de maíz con alcoholímetro integrado, cuyo cometido es informar sobre la necesidad de no conducir si la tasa de alcohol en sangre no lo permite, contribuyendo a mejorar la seguridad de sus clientes para que disfruten de la Super Bowl, la final del campeonato de la National Football League, principal campeonato profesional de fútbol americano en los Estados Unidos.
La bolsa de Tostitos tiene en el centro un gran círculo de color verde, sobre él aparece un pequeño círculo o zona donde el consumidor deberá soplar o echar el aliento, en el caso de que se detecte la presencia de alcohol en sangre, cambiará el dibujo y su color, apareciendo un volante rojo y el mensaje “Don’t drink and drive”, recomendando al usuario que no beba más y, por supuesto, que no conduzca.
El nuevo envase se denomina “Party Safe” (Fiesta Segura), integra un diminuto sensor que está conectado a un sistema o controlador, que detecta rastros de alcohol en el aliento. Ante una evaluación positiva, se brinda la posibilidad de volver a casa utilizando la red de transporte Uber, compañía internacional que opera con una aplicación que conecta a pasajeros con conductores particulares de coches que estén registrados en esta compañía y que, en teoría, ofrecen un transporte más económico que un taxi.
La promoción de Tostitos comprende una rebaja en este servicio de transporte privado, de 10 dólares (algo más de 9 euros) el próximo 5 de febrero, descuento que se obtiene al escanear el código de barras de la bolsa de chips. Pero hay más, Frito-Lay explica que si el consumidor de este producto no puede solicitar el transporte, la bolsa se encargará de realizar la gestión, para ello simplemente será necesario utilizar el teléfono móvil, bastará con acercarlo al círculo de color rojo, y se enviará la localización del cliente a Uber para que un transportista de la compañía lo recoja. Claro, que si uno ha tomado demasiadas copas, incluso esta opción resultará complicada llevarla a cabo, por no decir que quizá ni se acuerde de que cuenta con este medio de transporte para volver a su casa sano y salvo.
Esta iniciativa ha sido puesta en marcha por la agencia de publicidad Goodby Silverstein & Parteners y el acuerdo de colaboración entre Frito-Lay, Uber y la plataforma MADD (Madres en contra de conducir bajo los efectos del alcohol), organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es intentar evitar la conducción bajo los efectos del alcohol.
Esta curiosa promoción sólo estará activa durante el día de la Super Bowl, por lo que las bolsas de chips de maíz con este sistema sólo se comercializarán ese día y en los alrededores del estadio donde se disputará el partido, con una disponibilidad de 25.000 bolsas. Según leemos aquí, a la promoción podrán acceder los usuarios de Uber y los que no han utilizado nunca el servicio. Hay que decir que la bolsa no es un alcoholímetro reglamentario y que su único cometido es el de dar la recomendación de no conducir bajo los efectos del alcohol.
En fin, es una curiosa promoción de la que podéis conocer más detalles a través de la página oficial del producto.