El café es una de las bebidas más populares y consumidas en el mundo, y por ello ha sido objeto de múltiples investigaciones científicas que han revelado los numerosos beneficios que ofrece a la salud. Un reciente estudio realizado por expertos de la Universidad de Tulane, ha demostrado que además de que el consumo de café es beneficioso, es importante el momento del día en el que lo tomamos, siendo mejor tomarlo por la mañana.
Según este estudio, quienes toman el café por la mañana tienen un menor riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares, en comparación con las personas que lo consumen en otros momentos del día. Este descubrimiento hace hincapié en la importancia del momento de consumo para beneficiarse de los efectos del café en la salud. Se podría decir que los resultados guardan cierta relación con este estudio de la Universidad de Soochow, en el que se concluía que el consumo moderado de café y cafeína, se asociaba con un menor riesgo de desarrollar múltiples enfermedades cardiometabólicas.
Esta nueva investigación incluyó los datos de más de 40.000 personas adultas que participaron en el US National Health and Nutrition Examination Survey (NHANES) entre 1999 y 2018, se trata de un estudio nacional realizado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, con el objetivo es evaluar la salud y el estado nutricional de la población estadounidense a través de una serie de encuestas y exámenes médicos.
Los participantes del estudio realizaron cuestionarios sobre sus hábitos alimenticios y concretamente sobre el consumo de café, la cantidad que bebían y los horarios en los que lo tomaban. Los expertos comentan que los resultados fueron sorprendentes, las personas que consumían el café por la mañana tenían un 16% menos de riesgo de fallecer por cualquier causa, y hasta un 31% menos del riesgo de morir por enfermedades cardiovasculares en comparación con las personas que no consumían café, o aquellos que lo consumían a lo largo de todo el día.
El estudio también observó que los consumidores de café por la mañana experimentaron estos beneficios independientemente de la cantidad de café que consumían. Tanto los consumidores moderados (de dos a tres tazas al día) como los que lo bebían con frecuencia (más de tres tazas), vieron una disminución en el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, pero siempre que el consumo fuera limitado a las primeras horas del día. Estos resultados sugieren que el factor clave no es sólo cuántas tazas de café se consumen, también es importante cuándo.
Los expertos comentan que se trata del primer estudio que analiza de forma específica el impacto del momento del día en que se consume café y cómo afecta a la salud cardiovascular. Los investigadores explican que si bien las recomendaciones dietéticas tradicionales se han centrado en la cantidad y calidad de los alimentos y las bebidas, el estudio muestra que también se debería prestar atención al horario del consumo de otros alimentos y bebidas.
Según los investigadores la clave podría radicar en los efectos del café en nuestro reloj biológico, recordemos que no hace mucho hablábamos sobre cómo afecta el azúcar en el café al reloj biológico, estudio cuyos resultados mostraban que la combinación de cafeína y azúcar o edulcorantes, alteraba los ritmos circadianos ampliando el ciclo interno de 24 a 30 horas. Del mismo modo, el consumo de café por la tarde o por la noche podría alterar nuestros ritmos circadianos, afectando a la producción de hormonas como la melatonina, hormona producida por la glándula pineal que regula los ciclos de sueño y vigilia.
La alteración de estos ritmos podría provocar un incremento en la inflamación y la presión arterial, factores que están muy relacionados con el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Por el contrario, el consumo de café por la mañana, podría coincidir mejor con los procesos naturales del cuerpo, ayudando a regular dichas hormonas y reduciendo el riesgo de sufrir problemas de salud.
A pesar de que los resultados de este estudio son prometedores, aún no se puede determinar con certeza por qué el café por la mañana reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Los expertos sugieren que el consumo de café en horas tardías podría alterar los ritmos biológicos y provocar un aumento en la presión arterial y la inflamación, lo que podría explicar los resultados. Sin embargo, es necesario realizar más estudios que permitan confirmar los resultados y comprender en mayor profundidad los procesos que explican esta relación.
Los resultados abren la puerta a futuras recomendaciones sobre los hábitos de consumo del café, ya que ahora se sabe que disfrutar del café por la mañana puede ofrecer beneficios adicionales para la salud y especialmente en lo referente a la protección contra enfermedades cardiovasculares. Así que ya lo sabéis, lo mejor es disfrutar del café en las primeras horas del día, siendo un motivo más para seguir con este hábito matutino.
Podéis conocer todos los detalles de esta investigación de la Universidad de Tulane a través de este artículo publicado en la página de la European Society of Cardiology, y en este otro publicado en la revista científica European Heart Journal.
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