El arroz salvaje (Zizania Palustris) es una gramínia acuática. Conocido también como grano de agua o zizania, no se trata de lo que nosotros conocemos como arroz (Oryza Sativa), sino de la semilla de una planta que madura lentamente gracias al sol y al agua, conocida como Avena de agua o Arroz indio. Crece en los suelos pantanosos de América del Norte y sur de Canadá de forma silvestre, por lo que se trata de un alimento natural.
“Manomin” o grano precioso es el nombre que dieron los indios Chipewa a estas semillas que fueron causa de muchas disputas locales entre las tribus indígenas de América del Norte, pues era parte fundamental de su alimentación. Los primeros exploradores europeos lo bautizaron con “folle avoine” (grano salvaje), no tardaron mucho en apreciar su valor nutritivo y en comercializarlo como arroz salvaje.
El arroz salvaje muestra un color marrón oscuro tirando a verde, esto se debe a que conserva su cáscara, y por el tratamiento tradicional de secado y tostado, es un exquisito alimento para el paladar, ofrece un sabor que recuerda a la nuez y a la avellana, una textura crujiente y una presentación en los platos exótica y elegante.
En la cocina, esta gramínea nos ofrece infinidad de elaboraciones y combinaciones para servir un plato principal o una guarnición, lo que hay que tener en cuenta es que absorbe hasta cuatro veces su volumen en agua, por lo que cunde más de lo que pueda aparentar y el tiempo de cocción es bastante más largo, unos 40 minutos.
Una opción para que el tiempo de cocción se reduzca es dejar en remojo el arroz salvaje la noche anterior, como se hace con las legumbres, aunque esta técnica no la hemos probado.
En tiendas de alimentación podemos encontrar que nos venden el arroz salvaje mezclado con arroz blanco, ahí es donde encontramos que cometen un error, pues un grano te quedará demasiado cocido o el otro poco hecho. Lo ideal es adquirir el arroz salvaje solo y cocerlo por separado, después podrás mezclarlo con arroz basmati, integral o el que más te guste obteniendo mejores resultados.
En cuanto al valor nutritivo remarcar que es un alimento libre de gluten, además de ser una fuente de energía excelente, ofrece un alto contenido proteínico, hidratos de carbono, fibra y minerales a la vez que su contenido graso es muy bajo.
Además de ser un ingrediente noble y muy saludable, es un placer para el paladar.