No sabemos si definirlo como maridaje o armonía gastronómica, el primer término no es del agrado de muchos gastrónomos, particularmente profesionales y aficionados al mundo enológico, donde a menudo se habla del tipo de vino que acompaña bien a ciertas comidas como ‘maridar’. Maridaje es un enlace, unión y conformidad de los casados, pero también es la unión, analogía o conformidad con que algunas cosas se enlazan o corresponden entre sí, según la RAE. El término armonía también se refiere a la conveniente proporción y correspondencia de unas cosas con otras (entre otros significados). ¿Cómo definirlo?, pues ni con una ni con otra palabra, utilizaremos emparejamiento, como lo define el autor de la foto que ilustra este post.
Y esta no es la única, el fotógrafo gastronómico Kyle Dreier tiene entre sus proyectos una serie de emparejamientos que titula algo así como: Comer, beber y… encordar. Plasma en estas fotografías su respuesta a los maridajes estereotipados, son muchas las comidas que se relacionan con una bebida en particular, ya no hablamos sólo de vinos. De momento podemos ver ocho armonías, maridajes o emparejamientos, esperamos que sea un catálogo que se vaya ampliando.
Es la forma artística de un fotógrafo para mostrar el maridaje, la armonía o combinación gastronómica, reflejar las relaciones entre comidas y bebidas que están generalizadas. Claro, algunas nos pueden parecer extrañas a los españoles, donde no es muy habitual la Root Beer o cerveza de raíz, ¿y combinada con helado?
El emparejamiento de vino blanco y pescado es plural, aunque hay que decir que hay muchos vinos rosados y vinos tintos cuyas cualidades hacen que también sean buenos compañeros de un plato de pescado, también se podría hablar del cava o del champán. Y volviendo a la cultura gastronómica estadounidense, nos encontramos con el brownie de chocolate con leche y con los hot dogs y la cerveza.
Parece que para estas representaciones, el fotógrafo se ha fijado en platos o recetas tradicionales de distintos países del mundo, por ejemplo se refleja Alemania con los pretzels y la cerveza, Italia con el agua con gas, los espaguetis y las albónigas, la cocina japonesa no podría ser de otra forma, el sushi y el sake, y la francesa con el filet mignon y el vino tinto…
Si queréis ver todas las fotos de las combinaciones usuales representadas por Kyle Dreier, podéis acceder a su web.