Uno de los problemas a los que se enfrentan los bodegueros son las barricas de crianza, para que el vino ofrezca todos aquellos matices tan valorados por el mundo enológico, es necesario renovarlas tras un determinado periodo de tiempo, que dependiendo de la bodega varía entre los 2 y los 5 años.
Un nuevo sistema patentado por Barena Hispania, va a permitir proporcionar a las barricas un segundo ciclo de vida útil, es decir, alargar la vida de las barricas de vino y por tanto, proporcionar un considerable ahorro económico a los bodegueros.
Los dos primeros años de vida de una barrica aportan a los vinos un amplio abanico de compuestos aromáticos, eugenol, vainillina, etc., estos compuestos son los responsables de proporcionarles a los vinos esas notas especiadas que tanto gustan y seducen a los amantes de los buenos vinos. Transcurridos estos dos años, las barricas ya no aportan con tanta profundidad estos compuestos y en el plazo de tres años terminan por desaparecer, además, la aparición de determinados microorganismos provocan el fin de los días de la barricas, lo que obliga a los bodegueros a renovarlas.
El nuevo método planteado por los expertos de Barena Hispania ya ha sido probado en Francia ofreciendo resultados muy satisfactorios. Las barricas son regeneradas mediante la inyección de aire a presión con partículas de cuarzo en el interior, estas partículas se encargan de asear la barrica.
Posteriormente se someten a un baño de vapor de 105º C para erradicar cualquier microorganismo, dejando completamente aséptico el interior. El último paso del proceso consiste en inyectar SO2 (dióxido de azufre), este proceso garantizará que la madera se vea libre de cualquier microorganismo hasta la utilización de la barrica., que volverá a proporcionar al vino todos los matices y la oxigenación adecuada.
Los responsables de este nuevo sistema invitan a cualquier enólogo a probar una de sus barricas regeneradas, si realmente el sistema es efectivo, quiere decir que un bodeguero podrá ahorrar como mínimo un 60% si se trata de barricas de roble americano y hasta un 500% si se trata de barricas de roble francés.
La renovación tendrá un coste de 110 euros por unidad, un precio que dista mucho de los 600 euros que se deben pagar por una barrica de roble francés.
Vía | La Rioja