No siempre se dispone de todo lo que se desea en una cocina, y hay ciertas comidas que con las ‘moderneces’ no saben igual, hablamos por ejemplo de la escalibada o escalivada, un plato tradicional catalán que recibe este nombre por la técnica culinaria que lo hace posible. Escalivar es uno de los métodos de cocción más antiguos de la cocina tradicional catalana, se trata de asar las hortalizas enteras (berenjena, pimiento, tomate, cebolla…) sobre las brasas del fuego o al caliu (rescoldo). Después se pelan, se retiran pedúnculos y semillas, se cortan en tiras y se aliñan.
El sabor de estas hortalizas escalibadas es especial, delicioso, y no se consigue en una cocina doméstica moderna, aunque se hacen intentos posándolas directamente sobre la llama del fogón para que adquieran el toque ahumado. Otra opción es recurrir a ingredientes que recuerden el aroma de las brasas en los alimentos, sales ahumadas, humo en polvo, aceite ahumado…
Hoy es éste último el que os queremos mostrar, el Aceite arbequino al humo de roble. Desde que lo probamos hace ya un par de años, siempre tenemos una botella para aderezar ciertos platos, como la berenjena y el pimiento asado, los espárragos a la parrilla, las chuletas o las costillas de cordero, entre otros, siempre después de cocinarlos, una vez en el plato.
Este aceite pertenece a la colección de ‘Aceites del siglo XXI’ de Castillo de Canena, como el Royal Temprano, una línea de productos que sigue la línea de la calidad e introduce la innovación para enriquecer la cocina y los paladares.
Para producir este aceite ahumado, Castillo de Canena elige al aceituna arbequina, que ofrece aceites con aromas y sabores frutados. El aceite es infusionado en frío con humo de roble ecológico, y también con otras maderas aunque no se especifiquen en su nombre, porque haya, abedul… son minoritarias. El objetivo es mantener las propiedades del aceite de oliva arbequino incorporando los matices del humo de roble que llegarán al plato si se evita su calentamiento, es decir, sirviéndolo en crudo.
Este aceite arbequino ahumado se presenta en una botella totalmente opaca de 250 ml., ideal para darle un uso ocasional, pues así también lo requiere su precio, el Aceite al humo de roble de Castillo de Canena ronda los 15 euros y se puede encontrar en la tienda del productor.
¿Lo habéis probado?, nosotros ya os hemos dado algunas ideas para aportar el toque ahumado a ciertos platos, ¿cuáles son vuestras propuestas?