Smartway es una empresa que trabaja en la lucha contra el desperdicio de alimentos, y para ello creó en 2012 un sistema denominado Food Waste Management System, cuyo cometido es optimizar el aprovechamiento de los alimentos hasta el final de su vida útil. La empresa implementa lineales de cero desperdicios donde se reagrupan todos esos alimentos que han superado la fecha de consumo preferente, pero que son aptos para consumo.
Pues bien, hoy conocemos un estudio elaborado por esta empresa en el que se señala que los jóvenes españoles son los que más comida tiran a la basura. Según el estudio, a pesar de que nuestro país está comprometido con la reducción del desperdicio alimentario, se tiran a la basura unos 1.300 millones de kilos de alimentos por año, lo que supone una media de 31 kilos por persona.
Los datos del estudio se basan en una encuesta realizada entre el 16 y el 23 de junio de 2023, a 1.001 personas mayores de 18 años representativas de la población española. Según los resultados, un 42% de los encuestados presta mucha atención al desperdicio de alimentos, un 48% manifiesta prestar bastante atención, un 9% presta poca atención y un 1% ninguna atención.
Un 61% de los participantes de la encuesta manifestaron tirar al menos un producto alimenticio cada mes, un 23% contestó que tiraba al menos cinco productos alimenticios a la basura en el mismo periodo y sólo un 10% aseguró que no tiraban nunca comida. Sobre el tipo de desperdicio alimentario, un 37% de los encuestados aseguraron que al menos una vez al mes tiraban fruta a la basura, y un 34% desechaban pan y verduras. En la gráfica que podéis ver a continuación, se puede observar el tipo de alimento y la frecuencia con la que se tira a la basura según la encuesta.
Sobre las razones por la que se desechan los alimentos, un 49% lo hacen porque el producto alimenticio está en mal estado o no da confiabilidad, un 46% lo hace porque tiene mal olor o sabor, un 38% porque el producto ha superado la fecha de caducidad, un 13% debido al exceso de comida preparada (sobras), un 10% porque el envase está en malas condiciones, un 6% por haber comprado demasiada cantidad del producto alimenticio, un 4% por estar próximo el vencimiento de la fecha de caducidad, un 3% porque hace poca comida en el hogar y un 2% por otro tipo de razones. Hay que destacar que de la muestra de 1.001 personas, sólo un 12% asegura que nunca tira comida a la basura.
Respecto a los datos más significativos del etiquetado, de la encuesta se desprende que un 55% de los consumidores sabe diferenciar entre fecha de caducidad y consumo preferente, un 46% siempre revisa la fecha de caducidad antes de adquirir el alimento, un 44% coge los alimentos que se encuentran en la parte de atrás de los lineales para poder contar con una fecha de caducidad más amplia, un 42% conoce bien la fechas que se muestran en los productos alimenticios, y un 39% sabe qué significa la fecha indicada según el tipo de producto alimenticio.
En cuanto a la opinión sobre el desperdicio alimentario, se preguntó al grupo participante si estaba de acuerdo o en desacuerdo con una serie de afirmaciones y según los resultados, un 63% de los encuestados cree que las grandes cadenas deberían ofrecer descuentos más significativos en aquellos productos cuya fecha de caducidad está próxima, un 46% considera que las grandes cadenas deberían ofrecer más cajas sorpresa de productos alimenticios con fecha de caducidad próxima, y un 38% de los participantes de la encuesta preferirían un establecimiento que tenga en marcha una política contra el desperdicio de alimentos, antes que otra tienda que no la tuviera.
En la encuesta se han tratado preguntas como cuál es la percepción de las ofertas promocionales en los alimentos, o qué necesitan los consumidores para reducir el desperdicio alimentario. Los resultados del estudio muestran que una buena parte de los españoles prestan atención al desperdicio alimentario y solicitan un mayor descuento en los alimentos próximos a superar la fecha de caducidad.
Pero, como comentábamos, a pesar de que son las personas jóvenes las que se considera que están más sensibilizadas con la problemática, tiran a la basura hasta cuatro veces más alimentos que las personas mayores de 65 años. Los datos muestran que el 52% de los jóvenes de entre 18 y 24 años, tiran a la basura alimentos que han superado la fecha de caducidad, porcentaje que se reduce al 39% en el caso de los mayores de 65 años, y que el 19% de los jóvenes de entre 18 y 24 años tira a veces a la basura alimentos que aún no han superado la fecha de caducidad, porcentaje que se reduce al 5% en el caso de las personas mayores de 65 años.
En definitiva, de poco sirve una mayor conciencia medioambiental y sobre el desperdicio alimentario, si eso no se traduce en una práctica efectiva para reducir los problemas. Podéis conocer todos los detalles del estudio a través de la página oficial de Smart Way.