Hace algo más de un mes nos hacíamos eco de la posibilidad de que se diera una huelga en el sector lácteo a nivel europeo, una situación resultante de la crispación que muestra este sector ante la reducción de precios que están sufriendo los ganaderos por el litro de leche. Parece evidente que el aumento de la cuota de la leche ha tenido mucho que ver en ello, de hecho, los ganaderos creen que provocará nuevas caídas en el precio de venta que dan a las empresas.
Hoy ha comenzado la temida huelga en Alemania, los ganaderos alemanes se niegan a suministrar leche a las empresas lácteas hasta que no cambien las condiciones económicas actuales.
Por el momento, se estima que durante ocho o diez días la industria láctea alemana no va a recibir leche, la huelga ha sido secundada por el 80% de los productores y éstos se encuentran muy firmes en lograr sus propósitos.
¿Qué pasa con la leche producida en esos días?, pues será utilizada para alimentar a los terneros y toda la que sobre, será desechada. La asociación alemana BDM pretende mejorar el precio que perciben los ganaderos por el litro de leche que, en opinión de los ganaderos, es insuficiente e injusto.
Es extraño que la huelga no se haya generalizado, quizá la actuación alemana motive movilizaciones en otros países y tengamos que estar sin leche unos cuantos días hasta que se solucione el problema. De momento, los productores españoles pretenden agotar todas las vías de diálogo existentes, ya que no quieren perjudicar a los consumidores, pero puede llegar el momento en el que la situación se haga insostenible para ellos.
Al final, si no se soluciona el problema la huelga podría ser la única solución para forzar una mejora de los precios de la leche, esperemos que finalmente no seamos los consumidores quienes paguemos ese incremento.
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