En el mercado podemos encontrar distintos alimentos y etiquetas de calidad que avalan condiciones específicas de su localización, elaboración, control de calidad, etc. Son alimentos amparados bajo la Denominación de Origen Protegida (DOP), Indicación Geográfica Protegida (IGP), Especialidad Tradicional Garantizada (ETG), Producción Ecológica.. Todos ellos se engloban bajo la descriptiva Alimentos de Calidad Diferenciada, productos protegidos bajo el amparo de la normativa de la Unión Europea.
Alimentos como la Uva de Mesa del Vinalopó, el Queso de Murcia al Vino, el Pimentón de la Vera, la Torta del Casar, el queso Arzúa-Ulloa, la Alcachofa de Benicarló, el Botillo del Bierzo, la Miel de la Alcarria, el Pimiento Asado del Bierzo y así una larga lista de alimentos que se encuentran bajo el amparo de una D.O.P, una I.G.P, etc., que se ha ido ampliando significativamente desde hace casi 20 años.
Sobre los sistemas de calidad diferenciada creados por la Unión Europea a principios de la década de los 90, es responsable de informar que se cumplen todos los puntos de las distintas normativas el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM). Para saber más sobre los alimentos y etiquetas de calidad, una buena opción es acceder a la web del Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación (MAPA), página oficial que nos informa detalladamente a través de su buscador sobre el modo de cultivo, la localización, la página oficial de internet, etc.
Los distintivos que se utilizan en estos alimentos sirven para informarnos, como hemos dicho antes, sobre la calidad, la procedencia del producto y todas sus características, se trata de alimentos cuya percepción se traduce en un mayor valor y calidad con respecto a otros productos de la misma clase. Habitualmente son productos algo más caros, este hecho unido a los distintivos hace que los consumidores los considere productos gourmet y terminan siendo consumidos en momentos especiales, no siendo habituales en el consumo diario. Todas las etiquetas con DOP, IGP, ETG, etc., se relacionan con valores añadidos, pero parece que no existe una clara percepción de lo que quiere decir cada una de ellas.
A través del Pdf del Reglamento de la Unión Europea, podemos conocer exactamente que es una Denominación de Origen Protegida (DOP) o una Indicación Geográfica Protegida (IGP). En este documento se muestran exactamente cuáles deben ser las características y requisitos específicos que permiten portar a los alimentos una de estas etiquetas de calidad. Los Consejos Reguladores de cada producto se encargan de supervisar que cada uno de ellos se haya elaborado bajo los requisitos y garantías exigidas para ser un producto bajo los parámetros de calidad correspondientes.
Adquirir un producto con DOP, IGP, ETG, etc., es sinónimo de calidad diferenciándose de los alimentos de la misma clase, es una garantía de que lo que estamos disfrutando es auténtico y ofrece todo el sabor y la calidad que los consumidores esperamos recibir. Con estas marcas de calidad no sólo se eleva la condición de los productos, también se protege de las imitaciones y abusos de otros productores que aprovechan la fama o el renombre que ha adquirido un determinado producto, podemos poner como ejemplo las imitaciones del Queso de Murcia al Vino, un producto de excelente calidad que goza de Denominación de Origen Protegida.
Los productos con DOP tienen protección frente a la utilización comercial del nombre o denominación que aplican otros productores que no se encuentran bajo el reglamento. Como podemos ver en el caso del Queso de Murcia al Vino, las imitaciones aparecen y engañan a los consumidores, son productos que no han pasado por los controles pertinentes y tanto la elaboración como la calidad de los ingredientes no han sido factores constatados. Está en los consumidores diferenciar un producto de otro, pero para ello es necesario saber que nos transmiten los distintos sellos o marcas de calidad.
La protección de los alimentos y sus métodos de elaboración es una constante en toda Europa, cada vez hay más alimentos de este tipo. En España hemos pasado de los 20 productos bajo este amparo que podíamos encontrar en la década de los 90 a los más de 140 productos actuales, y la lista continúa creciendo, hay varias solicitudes en curso para obtener uno de estos sellos de calidad diferenciada.
Sin embargo, nosotros encontramos un problema, estas reglamentaciones son europeas y sólo protegen en el entorno europeo, esto provoca conflicto frente a otros continentes, podemos nombrar por ejemplo el caso del Sherry falso, Sherry es la D.O española que legalmente ampara a los vinos de Jerez en Europa, pero en Estados Unidos se elabora también Sherry, lo que puede confundir al consumidor y tener una percepción distinta de lo que en realidad es un Sherry español. Sería necesaria que la reglamentación de este tipo de alimentos pudiera ser aplicada en todo el mundo, de hecho, cada vez son más los países preocupados por la pérdida de derechos de sus productos y quieren reforzar la protección sobre ellos.
Otro ejemplo es el trabajo que están realizando expertos mexicanos para crear una huella genética que logre certificar la calidad de uno de sus productos más famosos, el Nopal con Denominación de Origen intentará evitar que el nopal producido en otros lugares, como el del continente asiático, no se apropie de la calidad, producción y comercialización del nopal mexicano.
Las etiquetas de calidad son muy importantes y son certificadoras de aspectos que benefician a los consumidores, muchos de estos alimentos han realizado un largo camino burocrático para poder portar su etiqueta, un signo de calidad inequívoco que se traducirá en todas las bondades que nos ofrezcan en la mesa. Pero ojo, esto no quita que haya alimentos sin etiqueta de calidad que merezcan toda nuestra atención por sus cualidades.
