El seitán se conoce como la carne vegetal, está compuesto por proteína y en las dietas vegetarianas es uno de los alimentos que se consumen en sustitución de la carne animal, por su aporte de proteínas y por que ofrece una textura similar.
La proteína que compone el seitán es el gluten de la harina de trigo, la forma de obtenerlo es sencilla pero entretenida, se elabora una masa con harina, agua y sal, como si fuéramos a hacer pan, después se deja reposar para que se desarrolle el gluten y finalmente se lava la masa con agua, así se irá perdiendo el almidón y otras sustancias solubles en agua y nos quedaremos con una masa elástica insoluble que es el gluten.
Se dice que el gluten como ingrediente independiente lo descubrieron en China alrededor del siglo VI, en las fábricas de tallarines, lo llamaban mien chin, que significa músculo de la harina, allá por el siglo XI. También era muy consumido en Japón, donde se conoce como Seitán y se popularizó en los países occidentales a mitad del siglo XX gracias a la promoción de la cocina macrobiótica, que lo transmitieron con el nombre de Seitán.
El seitán se creó con la finalidad de que los adherentes del budismo o los vegetarianos estrictos tuvieran un ingrediente de gran valor nutricional con el que elaborar alimentos que imitaban a la carne. Con este alimento se ingiere simplemente proteína, además de los nutrientes (vitaminas, minerales…) de los ingredientes con los que se cocinan, a diferencia de la carne de origen animal que aporta a nuestro organismo residuos ácidos.
Esta proteína es además más fácil de asimilar por el organismo que la proteína que proporciona la carne, siendo un alimento ideal para niños y adultos, pero no puede ser consumido por las personas que padecen intolerancia al gluten, los celíacos.
Los valores nutricionales de 100 gramos de seitán son 122 kcal., un 24% de proteína, un 2% de carbohidratos y la misma cantidad de grasas, además en su composición hay un 70% de agua aproximadamente.
Hay distintas formas de hacer seitán, unas tradicionales de China, otras de Japón, otras de Vietnam… En el mercado encontramos muchas variedades de seitán con distintos adobos y preparaciones, sea en bloques, en tiras, en conserva emulando una pieza de carne, etc. Pero hoy os vamos a explicar cómo hacer seitán en casa, como indicábamos al principio es sencillo y entretenido, pero muy satisfactorio.
Utilizaremos harina de trigo con alto contenido en gluten, pero en tiendas especializadas también podéis encontrar el gluten ya preparado para hacer vuestro seitán.
Con el seitán podemos hacer muchísimas recetas de cocina, tantas como las que podemos hacer con la carne de origen animal, guisos, plancha, fritos, sopas… también podemos hacer hamburguesas, croquetas, albóndigas o unos deliciosos nuggets. Su composición hace que se absorban muy bien los sabores de los condimentos e ingredientes que se añaden al cocinarlo, así que obtendremos un plato muy saludable, con una textura similar a la de la carne y con muy buen sabor. Si no lo habéis probado, seguro que os sorprenderá.
4 comentarios
Hola!! hice el seitán pero no me quedó con la consistencia que veo en la foto, me quedó muy blando, ¿cómo hago para que quede firme?
Gracias
Prueba esta receta Consuelo, y nos cuentas qué tal te ha salido:
https://www.gastronomiaycia.com/2009/05/03/como-hacer-seitan/
Saludos
Soy celíaca, por lo tanto el seitan, ni mirarlo. Por favor, hay algún sustituto? He probado con soja texturizada, pero no me gusta mucho. Gracias.
Hola Manuelz,
Desde luego, el seitán no es para ti, pero no entendemos de qué es el sustituto que estás buscando, si nos lo aclaras…
Saludos