Chr. Hansen, empresa de biociencia que trabaja en el desarrollo de soluciones naturales para las industrias de la alimentación, la nutrición, el sector farmacéutico y el sector agrícola, ha presentado los resultados de un estudio que tenía como objetivo conocer cuánto saben los consumidores de los probióticos en los alimentos, como sabemos, se trata de microorganismos vivos que ofrecen beneficios significativos para la salud intestinal y la inmunidad.
Se realizó una encuesta a 15.639 consumidores de 16 países de Europa, América Latina, América del Norte y Oceanía, a todos ellos se les realizaron preguntas sobre los probióticos. Según los resultados, un 75% de los encuestados están muy o algo familiarizados con los probióticos, el resto (25%) no estaban familiarizados en absoluto. A la pregunta sobre la definición de qué son los probióticos, una buena parte contestó sobre la asociación beneficiosa con la salud, que se trata de bacterias positivas que promueven la proliferación de las bacterias intestinales buenas y ayudan a mantener el cuerpo sano y funcionando correctamente.
A los encuestados que consumen regularmente alimentos probióticos se les preguntó sobre el grado de importancia que tienen para la salud, la respuesta más recurrente fue el interés de promover la salud intestinal e inmunológica, así como un apoyo importante para la flora bacteriana. Un 56% de este segmento de encuestados comentó que los consumía para mejorar el tracto intestinal, un 55% respondió que los consumía para mejorar la flora intestinal, y un 50% se decantó por la mejora del sistema inmune.
Pero un pequeño grupo de consumidores proporcionó una respuesta muy distinta, un 12% aseguró que consumía alimentos con probióticos porque tenían un mejor sabor que el mismo alimento sin las bacterias añadidas, y un 9% aludió a que les gustaba más la textura de estos alimentos que sus homónimos sin probióticos, sin argumentar ninguna referencia a la salud u otras cuestiones.
En relación a la salud intestinal, parece ser que los términos flora o microbioma intestinal no son tan conocidos por los encuestados, de hecho, alrededor de un 50% de ellos no estaban familiarizados dichos términos. El 50% restante declaró que eran términos que les resultaban familiares, un 81% lo asoció a la salud intestinal, un 41% a la salud del sistema inmune, un 40% al bienestar, y un 38% a la salud en general.
Sobre la preferencia de consumo de probióticos, la mayoría (un 36%) manifiesta consumirlos a la hora del desayuno, sobre todo los que los consumen regularmente. Para los que los consumen de forma esporádica, un 13% suele tomarlos como un refrigerio o tentempié, un 13% en la hora del almuerzo, un 14% a la hora de la cena, y un 10% como postre. En relación a las preferencias alimentarias, la encuesta revela que la forma preferida y más recurrente de consumo son los lácteos con un 52%, un 10% prefiere el queso como consumo de probióticos, un 9% los alimentos vegetales fermentados, y finalmente, un 7% los zumos.
El yogur es el alimento que tiene mayor frecuencia de consumo (diario), la media de consumo en el resto de alimentos como el queso, las bebidas fermentadas, etc., era de una vez a la semana. La principal motivación de los consumidores para elegir alimentos probióticos de una marca determinada es el sabor (60%), un 46% por su confianza en una determinada marca y un 36% por su precio aceptable. En general, los resultados sugieren un gran interés por el consumo de alimentos probióticos y por aprender más sobre ellos, según la encuesta, hasta un 71% de los participantes quieren tener más información y más específicamente, saber de sus beneficios a través de los envases de los productos alimenticios (53%), a través de internet (44%) y a través de aplicaciones móviles (38%).
Los responsables de la encuesta comentan que es posible que se necesite información adicional sobre los probióticos, ya que se han detectado conceptos erróneos comunes, por ejemplo, el 47% de los encuestados estuvo de acuerdo o algo de acuerdo en que todos los yogures contienen probióticos, el 73% coincidió erróneamente en que los cultivos activos vivos en el yogur es otra forma de decir que contiene probióticos.
La encuesta ofrece información de interés para la industria alimentaria, ya que muestra claves sobre cómo informar y popularizar este tipo de alimentos con probióticos beneficiosos para la salud. Podéis conocer todos los detalles del estudio a través de este artículo publicado en la página de la empresa Chr. Hansen.
Foto 1 | Gonmi