Hay unas 48 especies de caballa (Scomber scombrus), entre ellas podemos encontrar este pescado azul con nombres como Caballa del Atlántico, Verdel, Sarda, Macarela o Verta entre otros. La caballa se encuentra en abundancia en el Mar Mediterráneo, en el Océano Atlántico y en el mar Negro. De febrero a mayo son los meses de pesca de la caballa, que en los meses más fríos vive en el fondo del mar casi sin comer, y sube a la superficie en primavera para alimentarse, primero de zooplancton y después de crustáceos, moluscos, sardinas…
Algunas de las especies similares de la Scomber scombrus son el Estornino (Scomber japonicus), un pescado del Atlántico y del Pacífico, la Caballa Pintoja (Scomber australisocus), de las costas de Australia y Nueva Zelanda, del norte de China y Japón, de México oriental, del mar Rojo y del Océano Índico. La Caballa isleña (Rastrelliger faughni) se encuentra en la región occidental del Pacífico y la Caballa rechoncha (Rastrelliger brachisoma) en aguas tropicales del Índico y del Pacífico.
La caballa es un pescado muy valorado nutricionalmente, es rica en ácidos grasos omega-3, proporciona proteínas de alto valor biológico, vitaminas del grupo B como la B1, B2, B3, B6 y B12, además de vitamina D, E y provitamina A, y minerales como el hierro (algo escaso), el potasio, el fósforo, el magnesio y el yodo.
En la cocina nos da múltiples posibilidades, resultando un pescado muy sabroso al horno o a la parrilla. También es muy habitual hacer conserva de caballa, en escabeche o con diferentes salsas y marinadas, os recomendamos probar la receta de Caballa teriyaki con caramelo de aceituna negra.
Lo curioso es que con todas las bondades que ofrece la caballa, sea un pescado tan económico. Éste es un pescado que muestra un deterioro en su frescura bastante rápido, a la hora de comprarla debemos escoger las piezas que muestren una piel muy brillante y la carne tersa y consistente, y mejor que no sean muy grandes.
Una de las próximas elaboraciones que vamos a hacer con la caballa es marinarla de forma similar a como hacemos el salmón, pudiéndole añadir sal ahumada para proporcionarle ese característico sabor. Así dispondremos también de un gran pescado azul para disfrutar en los aperitivos. Y a ti, ¿Cómo te gusta preparar la caballa?.
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