Es posible que hayas pensado en hornear unas magdalenas para el próximo desayuno o merienda, y cuando ya estás en harina te das cuenta de que no tienes huevos. A nosotros también nos pasa, y en esas ocasiones no siempre se puede salir a comprar y mucho menos nos damos por vencido, hay alternativas. Una de ellas es hacer esta receta de magdalenas caseras sin huevo, una receta fácil y con la que tienes el éxito asegurado, porque son sencillas, pero quedan muy muy ricas.
Estas son unas magdalenas tiernas, esponjosas, suaves y se pueden aromatizar al gusto. En este caso le hemos dado el toque cítrico tradicional, pero también se puede añadir vainilla, canela o cacao en polvo, en este último caso, para hacer unas magdalenas de chocolate sin huevo, simplemente hay que sustituir unos 15-20 gramos de harina por cacao puro en polvo. Así que tomad nota, porque a continuación os enseñamos cómo hacer unas deliciosas magdalenas caseras sin huevo, pero con su copete.
Ingredientes (10 uds.)
- 230 gramos de harina
- 8 gramos de polvos de hornear
- 170 gramos de azúcar
- 130 gramos de aceite de girasol
- 200 gramos de leche o bebida vegetal
- piel de naranja o de limón rallada
- una pizca de sal.
Elaboración
Tamiza la harina con los polvos de hornear y ponla en un bol, añade el azúcar y a continuación los líquidos, la leche y el aceite de girasol.
Ralla la piel de un limón o de una naranja para aromatizar al gusto, incorpórala a los ingredientes anteriores y añade una pizca de sal para potenciar sabores.
Tritura hasta obtener una masa homogénea, quedará densa. Viértela en los moldes o cápsulas para magdalenas y deja reposar mientras se calienta el horno. Recuerda que las cápsulas de papel deben estar en un molde rígido, como ves en las fotos, sirven también unas flaneras.
Añade, si lo deseas, media cucharadita de azúcar en la parte superior de cada magdalena, quedará caramelizado y crujiente al salir del horno.
Calienta el horno a 215º C con calor arriba y abajo. Cuando alcance la temperatura, hornea las magdalenas durante unos 12-15 minutos, hasta que veas que han subido y se han dorado ligeramente.
Acabado y presentación
Cuando retires las magdalenas del horno, colócalas sobre una rejilla y deja enfriar. Después estarán listas para comer y disfrutar de un rico desayuno o merienda. ¡Buen provecho!
