Os van a sorprender estas trufas cremosas de chocolate y avellanas, y preferimos llamarlas así porque si decimos que son unas trufas de garbanzos, avellanas y cacao, quizá más de uno pasaría de largo, y no lo recomendamos. La razón es sencilla, son un bocado muy goloso, ideal para esos momentos en los que apetece algo dulce, algo de chocolate, algo cremoso que envuelva el paladar… No sólo cumplirán estos deseos al comer una de estas trufas, además se estarán aportando nutrientes interesantes y beneficiosos para la salud, las proteínas y carbohidratos de la legumbre, las grasas saludables de la avellana, los antioxidantes del cacao, vitaminas, minerales, etc.
Y la receta es muy fácil y rápida de elaborar, así que tomad nota cuanto antes, preparad las trufas y ofrecérselas a vuestra familia o amigos sin que sepan de qué están hechas. Les van a encantar. Y cuando sepan que están disfrutando con unas trufas de chocolate saludables hechas con garbanzos, no se lo podrán creer. De lo que no tendréis duda es de que estas trufas con avellanas y cacao las repetiréis.
Por cierto, no es el primer dulce con legumbres que compartimos con vosotros, recordad que ya hemos hecho algún bizcocho, crema untable, brownie… ¿Habéis probado alguna de esas recetas? Nos encantará que nos lo contéis, y también que compartáis si tenéis recetas dulces con legumbres, a menudo se hacen mucho con alubias y con soja, de hecho, es típico en algunas cocinas asiáticas.
Ingredientes (10 uds.)
- 140 gramos de garbanzos cocidos
- 15 gramos de manteca de avellanas
- 20 gramos de cacao puro en polvo
- ¼ de vaina de vainilla (las semillas del interior)
- c/n de edulcorante líquido
- 40 gramos aprox. de agua.
Para decorar
- c/n de avellanas
- 30 gramos de harina de chufa, de almendra o de avellana,
- 10 gramos de cacao en polvo
- 80 gramos aprox. de chocolate negro
- 8 gramos aprox. de aceite de coco.
Elaboración
Enjuaga los garbanzos cocidos y escúrrelos muy bien. Ponlos en el procesador de alimentos o en el vaso de la batidora, añade la manteca de avellanas, el cacao puro en polvo, el interior de la vaina de vainilla y el edulcorante líquido, tritura.
Si queda demasiado seco puedes añadir el agua, la cantidad puede variar según la densidad de la manteca de avellanas, y también de los garbanzos. Al final debe quedar una masa maleable. Prepara un plato mezclando la harina de chufas (es la que teníamos a mano y como tiene un toque dulzón queda bien, pero se puede hacer con almendra o avellana molida) y el cacao en polvo para rebozar.
Con ayuda de dos cucharas, coge porciones de masa de unos 20 gramos, dales un poco de forma pasando la porción de una cuchara a la otra, y ponlas en el plato para rebozar. Cuando cada porción esté cubierta con la harina y el cacao, bolea con las manos. Si lo deseas, coloca una avellana en el centro de cada trufa.
Déjalas reposar en el frigorífico unos minutos, o en el congelador si quieres ir más rápido. Mientras tanto, funde el chocolate al baño maría o en el microondas, en tiempos de 30 segundos y cuidando que no se queme, recuerda que antes de que se funda totalmente dentro del micro, con el calor que tiene y batiéndolo con una cuchara se terminará de fundir y quedará brillante.
Añade el aceite de coco al chocolate fundido, mezcla bien y decora las trufas al gusto. Ve dejando las trufas sobre papel vegetal hasta que el chocolate se solidifique.
Acabado y presentación
Tus deliciosas y saludables trufas de chocolate y avellanas están listas para comer, las que queden, consérvalas en el frigorífico, en un recipiente hermético. Y recuerda sacarlas unos cinco minutos antes de comerlas para que no estén demasiado frías y disfrutar más de su sabor. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria