Con la remolacha asada nos encanta preparar distintos tipos de sopas frías, como las ya populares variantes del gazpacho y el salmorejo, esperamos que las hayáis probado porque son una delicia. También queda muy rico el hummus con remolacha asada, y sí, decimos asada porque para este tipo de recetas preferimos hacer la carnosa raíz en el horno, por muy cómodo que resulte comprar un paquete de remolachas cocidas. No obstante, no os cortéis en recurrir a este producto que se encuentra en cualquier supermercado, siempre que sean piezas enteras y que no lleven más ingredientes que la propia raíz.
La Sopa fría de remolacha ahumada con queso feta marinado y arándanos que os proponemos cocinar en estos días, porque es una receta sublime para este verano, quedará igualmente deliciosa si utilizáis la remolacha cocida, pero si vais a la frutería y compráis esta raíz fresca, podréis cocinarla como os explicamos a continuación. Y si hacéis cantidad de sobra, tendréis para hacer otras deliciosas recetas, en Gastronomía y Cía no os faltarán ideas… Empezad probando por pasar unas rodajas gruesas por la plancha para dorarlas y potenciar su sabor…
Pero antes, no dejéis de esta especie de gazpacho de remolacha cuya guarnición es el queso feta marinado con arándanos y hierbas aromáticas que compartimos con vosotros hace unos días, podéis volver a ver la receta pulsando en el enlace que está bajo estas líneas. Veréis que hay algunos condimentos que son opcionales, pero si os queda alguna duda, no dejéis de comentarlo para solventarla. Y compartid esta receta de sopa fría de remolacha con vuestros amigos, os agradecerán el disfrute que les proporcionará degustarla.
Ingredientes (4 comensales)
- 400 gramos de remolacha asada entera
- 130-140 gramos de tomate pera maduro
- 1 diente de ajo
- 50 gramos de cebolla tierna
- 400 gramos de agua
- pimenta negra recién molida al gusto
- c/n de sal
- 15 gramos de vinagre de Jerez Gran Reserva
- 15-20 gramos de salsa de ostras
- 40 gramos de aceite de oliva virgen extra
- ½ c/c rasa de xantana (opcional)
- unas gotas de humo líquido
- c/n de queso feta marinado con arándanos y albahaca (ver receta).
Elaboración
Envuelve tres o cuatro piezas de remolacha en papel de aluminio, después de lavarlas y secarlas bien. Colócalas en una bandeja en el horno precalentado a 180º C, y asa las remolachas durante una hora o hasta que estén tiernas, puedes comprobarlo pinchando con una brocheta o la punta de un cuchillo. Después déjalas enfriar.
Pela las remolachas y pon la pulpa necesaria para hacer esta especie de gazpacho en el vaso de la batidora o robot de cocina. Añade los tomates troceados, el diente de ajo pelado y troceado, la cebolla también troceada groseramente, e incorpora el agua.
Condimenta con sal al gusto, vinagre de Jerez, salsa de ostras y aceite de oliva virgen extra. La xantana ayuda a emulsionar y a espesar un poco la sopa, pero es un ingrediente opcional. Finalmente añade unas gotas de humo líquido que le aportará profundidad y esa nota ahumada tan agradable (también es opcional).
Tritura hasta obtener una crema ligera, fina y bien emulsionada, y reserva en el frigorífico hasta el momento de servir.
Acabado y presentación
Sirve la sopa fría de remolacha ahumada en platos hondos y reparte el queso feta marinado con arándanos y unas gotas de su aceite. Decora con unas hojas de albahaca y opcionalmente, añade un poco de Tajín (chile y lima). ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria