Son varias las investigaciones e innovaciones que se llevan a cabo con el propósito de poder abastecer de alimentos a la población mundial en las próximas décadas, hemos hablado de la carne y el pescado de cultivo celular, de las alternativas vegetales, de las proteínas de insectos y de algas, o las elaboradas a partir de agua, dióxido de carbono y electricidad, entre otras. Hoy conocemos una propuesta realizada por Arbiom, una empresa que aboga por la innovación y que tiene por objetivo contribuir en la creación de un sistema alimentario más saludable y sostenible.
Arbiom ha desarrollado soluciones que permiten transformar los subproductos de la madera en ingredientes alimenticios para animales, pero recientemente ha presentado otra novedad, se trata de convertir los desechos de la madera en proteínas para la alimentación humana a través de una tecnología que aprovecha la biomasa lignocelulósica (materia seca vegetal), recurso infravalorado, según la empresa, y que termina siendo pasto de las llamas en la mayoría de ocasiones.
La empresa puede reciclar estos desechos a través de un proceso de fermentación con el que convierte las levaduras en ingredientes proteicos, no se utilizan ni organismos genéticamente modificados ni coadyuvantes (ciertas sustancias químicas). El proceso se lleva a cabo en diferentes procesos, primero se descomponen los desechos de madera en moléculas simples que pueden ser fermentadas o consumidas por las levaduras, posteriormente y tras el crecimiento, se procede a separarlas de cualquier medio residual (los restos de materia prima utilizada en el primer proceso).
Posteriormente se procede al secado de la biomasa de levadura que se ha recogido sin hacer uso de ningún proceso químico, no se añaden aditivos, etc., según los responsables de Arbiom, se trata de un proceso sencillo, natural y eficaz que en comparación con la obtención de otras proteínas de origen vegetal, tiene una menor carga de emisiones de gases de efecto invernadero. El caso es que la empresa ha desarrollado un primer estudio para usar el nuevo ingrediente proteico en alimentos para seres humanos, centrándose en los alimentos vegetales alternativos a la carne o “carnes” vegetales.
Los resultados muestran un gran éxito, ya que se ha logrado integrar la proteína sin que se vean afectadas las cualidades organolépticas o la calidad del alimento. Sobre el sabor se destaca que es umami, lo que resulta beneficioso para su aceptación. Por otro lado, se asegura que puede reemplazar diferentes funcionalidades de otras proteínas vegetales como, por ejemplo, la preparación de emulsiones. El nuevo ingrediente aporta el 55% del contenido de proteína en un producto alimenticio, en realidad es una forma de proteína y aminoácidos que tiene un 95% de digestibilidad, comprándose a los aislados de la proteína de soja, los productos ricos en proteínas de alta calidad y las proteínas animales.
Ahora la empresa aborda otra cuestión, conseguir llevar su producto al mercado estadounidense y europeo, pero antes debe conseguir obtener los permisos oportunos por parte de las agencias reguladoras, y en este sentido cree que no tendrá problemas, ya que existe cierta historicidad en el uso de madera como materia prima para la elaboración de alimentos. A través de la página oficial de Arbiom podréis conocer más detalles sobre las proteínas alimentarias procedentes de la madera, los valores nutricionales, la trazabilidad, la sostenibilidad, las cuestiones económicas, etc.