Muchas veces comentamos el hecho de que unas verduras pueden gustar más o menos según el método de cocción o el punto de cocción, pues no es lo mismo comer un brócoli que se haya sumergido en agua para cocerlo y que haya perdido todo su sabor, su color y su textura, de comer un brócoli hecho al vapor u horneado y ligeramente tostado. Pero el aderezo o salsa también puede tener un papel fundamental para conquistar a los comensales, y hoy os traemos una receta que os puede ayudar a ello, es nuestra vinagreta de semillas para ensaladas y verduras, en la que destacan también ingredientes como un verdadero vinagre balsámico de Módena y una pizca de sal negra del Himalaya, que aporta unas notas a huevo que, de primeras, sorprende, pero seguidamente conquista.
Así que tomad nota de la elaboración paso a paso de esta receta de vinagreta, es muy fácil y rápida de preparar, sólo hay que tostar ligeramente la mezcla de semillas, que puede contener sésamo, linaza, girasol, calabaza, chía, amapola… mientras se unen en un cuenco el resto de ingredientes, el principal es el aceite de oliva virgen extra, después añadimos vinagres, mostaza, unas notas de ajo y cebolla… No la dejéis para otro momento, esta Vinagreta de semillas es una receta que pondrá la guinda a vuestras ensaladas y verduras, sean cocinadas al vapor, a la plancha, a la parrilla, al horno o como más os gusten.
Ingredientes
- 40 gramos de aceite de oliva virgen extra
- 10 gramos de vinagre de manzana
- 10 gramos de vinagre balsámico de Módena
- 15 gramos de mostaza de Dijon
- 1 c/p de azúcar de dátil (opcional)
- 15-20 gramos de mix de semillas (girasol, calabaza, chía, sésamo, linaza...)
- una pizca de sal yodada
- una pizca de sal negra del Himalaya
- una pizca de pimienta negra recién molida
- ½ c/c de ajo en polvo
- ½ c/c de cebolla en polvo.
Elaboración
Pon a calentar una sartén a fuego suave, que sea una sartén antiadherente y no añadas aceite ni ninguna otra grasa. Cuando esté caliente incorpora las semillas y deja que tomen temperatura y que se tuesten suavemente, moviendo las semillas de vez en cuando para que se hagan de forma homogénea y para potenciar su sabor y una textura más crujiente.
Mientras tanto, en un bol pon el aceite de oliva virgen extra, el vinagre de manzana, el vinagre balsámico de Módena, y la salsa mostaza de Dijon. Opcionalmente añade el azúcar de dátil, en su defecto, puedes añadir una cucharadita de miel.
Seguidamente incorpora al cuenco las semillas recién tostadas, la sal fina, la sal negra del Himalaya, la pimienta, el ajo y la cebolla en polvo. Bate bien con una pequeña varilla o con un tenedor para emulsionar la vinagreta.
Acabado y presentación
Sirve la vinagreta de semillas en una salsera o vinagrera para llevarla a la mesa y que cada comensal se sirva al gusto, aunque también puedes servirla directamente en el plato que has cocinado. De todos modos, es fácil que algún comensal quiera añadir un poco más, queda deliciosa. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria
