Según los datos de la firma de contadores públicos UHY Hacker Young, especializada en estadísticas, contabilidad, auditorías, finanzas, etc., el crecimiento de la cerveza artesana se ha frenado en Reino Unido, se trata de una desaceleración drástica experimentada en el año 2018, ya que sólo se han creado ocho nuevas cerveceras frente a las 390 que se abrieron en el año anterior.
Recordemos que en el año 2016 se abrían 10 nuevas fábricas de cerveza artesana cada semana, llegando entonces a un máximo histórico de 520 cerveceras fundadas en un año. A esto hay que sumar que el registro de marcas de cerveza artesana aumentaba de una manera significativa entre 2016 y 2017, de ahí que habláramos de una burbuja de la cerveza artesana que podría terminar explotando. Hay que tener en cuenta que ya en 2014, según un informe de la organización Campaign for Real Ale (CAMRA), Reino Unido era el país con más fábricas de cerveza per cápita del mundo.
Los datos de crecimiento del sector han tocado techo y han descendido hasta la tasa de crecimiento del año 2014, el mercado de la cerveza artesana ha dado un giro y se ha vuelto complicado para todos los que quieren abrir una nueva cervecera, la razón, según UHY Hacker Young, son las cerveceras multinacionales que continúan comprando e invirtiendo en las cerveceras artesanas de mayor éxito. La inversión de estas compañías cerveceras, su capacidad de negociación con minoristas y cadenas de pubs, contar con redes de distribución establecidas, etc., ha creado barreras complicadas de superar para las pequeñas cerveceras y, sobre todo, para quienes quieren iniciarse en el negocio de la elaboración de cerveza craft.
En 2017, la Sociedad Británica de Cerveceros Independientes (SIBA) creó un nuevo sello que certificaba que la cerveza artesana procedía realmente de una pequeña empresa artesana independiente y no de una gran compañía industrial. Este sello quería proporcionar transparencia a los consumidores para que supieran quién estaba detrás de la cerveza artesana que tomaban, ya que las grandes compañías estaban adquiriendo estas pequeñas cerveceras sabiendo el potencial que tenían, así se quitaban de en medio competidores y garantizaban el volumen de ingresos de ese segmento de consumidores que busca disfrutar de cervezas que se alejen del sabor estandarizado de la cerveza industrial.
Sobre estas líneas, podéis ver los datos de crecimiento de las cerveceras artesanas en Reino Unido desde el año 2013, se aprecia un parón significativo en 2018, esto nos hace retomar la idea de la burbuja de la cerveza, quizá en los próximos datos que conozcamos, se empiece a experimentar un notable descenso del número de cerveceras. UHY Hacker Young comenta que no está diciendo que el mercado se esté reduciendo, simplemente que ya se han consolidado un gran número de cerveceras y que los que quieran embarcarse en este negocio lo tienen más complicado, de ahí que apenas se hayan creado nuevas cerveceras en 2018.
Las grandes compañías ya no pueden contar únicamente con su modelo de cerveza industrial estandarizada si quieren crecer aún más, por lo que buscan nuevos nichos con un alto potencial de crecimiento que les permita aumentar sus ingresos y beneficios económicos, en este caso el de la cerveza artesana, nicho que año tras año crece de forma significativa en muchos países del mundo. Al respecto, merece la pena retomar la lectura de este post en el que hablábamos de las cinco tendencias de consumo de la cerveza artesana y de lo que había crecido el sector.
Ya veremos si esta desaceleración es en realidad una consolidación y estabilidad del mercado, o el inicio de una caída en el número de cerveceras como consecuencia de varios factores, la saturación del mercado, las acciones de las grandes cerveceras, etc. Podéis conocer todos los detalles del análisis a través de este artículo publicado en la página de UHY Hacker Young.
Foto 1 | Domaine Hudson