Hoy os traemos una nueva receta de tarta de queso que os va a encantar, se trata de una Tarta de queso y açai deliciosa, con la que podréis endulzar el postre o la merienda este fin de semana. La receta es muy sencilla, como la de nuestra tarta de queso tradicional, la que más nos gusta por su cremosidad y sabor. Aunque muchas personas no conciben una tarta de queso sin la base crujiente de galleta, siempre vamos a recomendar probarla sin ella. De todos modos, esta y cualquier tarta de queso que se presente sin base de galleta, no tiene inconveniente en incorporarla.
Sobre el açai, para quien no lo conozca, es una fruta que se dice que es originaria de Brasil y crece también en otros países del norte de Sudamérica, se trata de un alimento muy importante en la dieta amazónica que se consume desde tiempos precolombinos. El açai es el fruto de una palmera (Euterpe Oleracea) que crece únicamente en estado silvestre, son pequeñas bayas redondas, de unos 10-14 milímetros de diámetro, de color morado muy oscuro, de hecho, se parecen a los arándanos.
Seguramente conocéis el açai, aunque no en su estado natural, porque no es fácil encontrarlo fuera de su hábitat. El formato que cada vez se puede encontrar en más comercios (sobre todo en tiendas de alimentación saludable, de dietética y deportiva) es el del açai en polvo, con el se hacen helados, bizcochos, tortitas y los apreciados açai bowls. Es fácil adivinar que la tarta de queso con este fruto rojo será una exquisitez para los amantes de este tipo de pasteles, para los más golosos y para los que no lo son tanto, así que tomad nota de la receta a continuación.
Ingredientes (Molde alto de 18 cm. diámetro)
- 250 gramos de ricotta (se puede sustituir por queso crema)
- 250 gramos de queso de Burgos
- 80 gramos de leche o bebida vegetal
- 3 huevos L
- 50 gramos de avena integral molida
- 150 gramos de azúcar
- 1 y ½ c/s de açai en polvo
- un poco de mantequilla para el molde
- frutos rojos para acompañar.
Elaboración
Pon en un bol el queso ricotta y el queso de Burgos, añade la leche y los huevos. Para incorporar los huevos, cáscalos de uno en uno en un pequeño bol y ve incorporándolos al bol del queso, de este modo se evitaría tener que tirar todo si saliera un huevo malo, aunque es difícil, nunca está de más prevenir.
Añade también la avena molida que, en su defecto, se puede sustituir por harina de trigo o Maizena. A continuación incorpora el azúcar y el açai en polvo. Tritura con la batidora de mano hasta obtener una crema fina y homogénea. Reserva.
Prepara el molde para hacer la tarta de queso untándolo con mantequilla, enciende el horno a 175º C con calor arriba y abajo. Mientras se calienta, la masa reposará y perderá algo de burbujas de las que se han generado al triturar. Si se desea que la tarta no tenga nada de burbujas, convendrá que repose más tiempo.
Vierte la masa en el molde engrasado e introdúcelo en el horno. Programa unos 40-45 minutos, aunque el tiempo puede variar según el horno o si se utiliza un molde más grande, por ejemplo. A mitad de la cocción, si ves que coge mucho color por la superficie, cúbrerla con papel de aluminio.
Finalizado el tiempo de cocción, comprueba que la tarta de queso está hecha pinchando en el centro con un palillo o brocheta. En ese momento, retírala del horno y deja enfriar antes de desmoldar.
Acabado y presentación
Desmolda la tarta de queso ricotta y açai para presentarla en una bandeja o soporte de tarta, puedes cubrirla con frutas rojas frescas, arándanos, frambuesas, fresas… unas hojitas de hierbabuena y a conquistar a los comensales. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria
