En las neveras de la mayoría de supermercados, en la zona de los alimentos vegetales, las hierbas aromáticas se han hecho un hueco hace ya algunos años. Es más, en algunos de gran tamaño, o más bien en los hipermercados, se pueden comprar hasta macetas de hierbas aromáticas. Las dos opciones nos parecen buenas a la hora de comprar estas plantas frescas para incorporarlas a nuestros platos, ya sabéis que, junto a las especias, son imprescindibles en nuestra cocina.
Hoy dejamos al margen las macetas de hierbas aromáticas de los supermercados para hablar de las que se presentan en bolsitas o bandejas, seguramente no hace falta explicaros que se presentan varias ramitas de hierbas aromáticas, tales como cebollino, cilantro, albahaca, perejil, eneldo, romero, tomillo… en una bandejita de plástico fino y transparente, algunas con una tapa del mismo material y otras introducidas en una bolsa. Pues bien, la pregunta que nos hacemos es ¿cuánto duran las hierbas aromáticas del supermercado?
Pero lo realmente preocupante es cuántas hierbas aromáticas se tiran a la basura, y no sólo en los hogares, también en los supermercados, pues si sois consumidores de este vegetal habréis visto en más de una ocasión que lo que está a la venta en la nevera del super no pasará de esa noche, y por supuesto, no os lo vais a llevar a casa porque le falta toda la tersura, toda la vida que necesita para ofrecer al consumidor su aroma, su sabor y su textura.
Hace unos días leíamos un artículo titulado algo así como ‘Desperdicio de tomillo: ¿por qué tenemos que comprar más cantidad de hierbas de las que piden las recetas? Su autora explicaba que cada vez que una receta le pide una o dos cucharadas de alguna hierba aromática recién cortada, acudía a comprar al supermercado un contenedor de plástico que tenía al menos tres veces más de lo que necesitaba. Y unos días más tarde se encontraba junto a la basura tirando ese mismo estuche lleno de la hierba marchita.
También explicaba que contactó con el fundador y CEO de una empresa que comercializa hierbas aromáticas y que, entre otras cosas, comentaba que el tamaño de los envases, si fuera adecuado a la cantidad que se suele requerir para una receta, no sería rentable para los comerciantes minoristas. Es más, parece que su empresa lo puso en práctica, creó un envase de tamaño aproximado a la demanda de una receta individual, pero no tuvieron éxito, los consumidores no compraron los suficientes envases de este tipo como para que a los minoristas les compensara tenerlos a la venta.
Entonces, ¿qué solución hay para no tener que tirar las hierbas aromáticas que no se han consumido, porque se han marchitado? Pues hay varias soluciones, algunas no dependen de los consumidores, pero es posible que poco a poco en algunos mercados vayan llegando y estableciéndose, y es que se realice la venta a granel. Recientemente hablábamos sobre el nuevo concepto de supermercado cuya filosofía es no generar desperdicios, ni alimentarios ni de otra índole, son los denominados ‘Supermercados cero residuos’, y es que todo lo venden a granel o en recipientes reutilizables.
¿Llegaremos a poder comprar las hierbas aromáticas a granel? Dos o tres ramitas sólo, las necesarias para una receta. La verdad, personalmente nos parece que no hace falta llegar a eso, sólo es necesario un poco de organización, aunque no siempre es fácil, y os lo decimos porque también hemos tenido que tirar muchas veces restos de hierbas aromáticas frescas. Y es que no sólo se desperdician las hierbas, también se tira a la basura todo lo que se ha invertido para producirlas, la mano de obra y los recursos para fabricar las bandejitas de plástico y las bolsas, para transportarlas al comercio minorista… El gasto es enorme, y no sólo el económico, también el medioambiental.
Así que es importante que nos concienciemos y poner remedio a este desperdicio, para empezar, es bueno saber que, según algunos expertos, es mejor conservar los tallos de las hierbas frescas en un recipiente con agua (como si fueran unas flores decorativas) a temperatura ambiente, y no en el frigorífico. También es interesante tener en cuenta que cuando se compra una aromática para una receta, se puede planear elaborar otra receta en la que también se incluya, y si no se os ocurre ninguna, pues se hace una versión de salsa pesto para un plato de pasta.
En este aspecto nosotros no tenemos problema, pues nos gustan las ensaladas (que solemos consumir casi a diario) con albahaca, con cilantro, con cebollino… De todas formas, con estas y otras hierbas también se pueden hacer mantequilla de hierbas (os dejamos esta receta como ejemplo) y aceites aromatizados, o si se prefiere se pueden congelar, aunque después no se podrán utilizar en crudo, mejor para cocinar, por lo que pierden bastante sus cualidades organolépticas. Y otra opción es congelarlas.
Seguramente vosotros también tenéis algunas ideas para evitar que se estropeen las hierbas aromáticas que compráis para vuestras recetas, compartidlas, aprovechemos los recursos que nos da la tierra y la mano de obra que se emplea, pues lo pagamos todos. Y os recordamos que en el blog tenemos varios recopilatorios de recetas con distintas hierbas aromáticas, como el eneldo, la albahaca, el cilantro… seguro que os resultan útiles.
Foto 1 | Kate Ter Haar
Foto 2 | Jules