Poco a poco se extiende el uso de los circuitos cerrados de cámaras de televisión en mataderos para poder garantizar que los consumidores disfrutan de alimentos procedentes de animales que han recibido un trato digno. El último país que decidió adoptar esta medida fue Israel tras haber recibido varias denuncias sobre el trato que reciben los animales en los mataderos. Por ello, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural del país anunció la instalación de estas cámaras a lo largo del 2016 en todos los mataderos.
Pues bien, ahora es el país galo el que está planteando esta medida, hace unos días se votó y aprobó la propuesta de ley para instalar cámaras de televisión en los mataderos de Francia, pero ésta deberá ser analizada por la cámara alta del Parlamento y posteriormente se volverá a enviar a la Asamblea Nacional (una de las dos cámaras que componen el parlamento), si se aprueba, la medida se convertirá en ley, obligando a que los más de 950 mataderos del país instalen circuitos cerrados de televisión con el propósito de evitar las negligencias y el maltrato animal. Si todo sale según los previsto, se espera que estos sistemas de vigilancia se instalen el 1 de enero de 2018.
Para quienes luchan por los derechos y el trato digno de los animales es una gran victoria, también para los consumidores que quieren productos de origen animal obtenidos con garantías de bienestar. Como ocurrió en Israel, la medida se planteó a raíz de las numerosas denuncias realizadas por grupos que trabajan para proteger el trato justo a los animales, se aportaron numerosas pruebas (fotografías y vídeos) de lo que ocurría en los mataderos. Con la medida se persigue que se cumpla la reglamentación que tiene como finalidad reducir, en la medida de lo posible, el sufrimiento de los animales, violar este reglamento supondrá sanciones penales y financieras graves.
Las imágenes que se graven en estos circuitos cerrados se mantendrán durante un mes y podrán ser consultadas por los servicios de control veterinario y bienestar animal, posteriormente se podrán eliminar. También se creará un comité que tendrá la función de analizar el desarrollo de la legislación y los reglamentos relativos al bienestar animal en los mataderos, este comité estará formado por representantes de diferentes sectores, asociaciones de consumidores, asociaciones de protección animal, veterinarios, productores de ganado, representantes de los mataderos, etc.
De este modo, Francia se puede convertir en el primer país europeo que legisla sobre este tema e introduce el control obligatorio de los mataderos con circuitos cerrados de televisión. Hay que decir que en este proyecto se solicitaban otras medidas, como por ejemplo, la creación de comités para supervisar los mataderos a nivel local o la presencia de veterinarios a la hora de aturdir a los animales, medidas que quizá se consideraron excesivas. Aunque se habla de triunfo, tal vez habría que esperar a que se aprobase la ley, sobre todo sabiendo que en la votación de la propuesta se produjo una gran abstención, quizá en la votación definitiva las cosas cambien.
Según explican aquí, la organización que representa a la industria de la carne en el país considera que esta medida no es efectiva y además es contraproducente, la protección de los animales en los mataderos no se reduce a una cuestión de cámaras de vigilancia. Estas grabaciones sólo ayudarían a los activistas que van contra el consumo de carne, su cometido real no es el bienestar de los animales, sino que se deje de consumir carne. Se argumenta que los trabajadores de los mataderos cuentan con un certificado de aptitud para el bienestar animal y que las negligencias son muy excepcionales. Sin embargo, hay que recordar que las organizaciones animalistas han aportado muchas pruebas que supuestamente demuestran lo contrario, ¿quién miente?
La UECBV (European Livestock & Meat Trading Union), organización que representa a las federaciones nacionales de los mercados de ganado, a los comerciantes de ganado, de carne, mataderos, salas de despiece y plantas de preparación de la carne, entre otros. Asegura que las negligencias son muy excepcionales dado que existen controles oficiales permanentes en los mataderos, de lo contrario no podrían llevar a cabo la labor que desempeñan.
Considera que el bienestar animal no es una cuestión tecnológica, sino de personas, formación, sentido común, guías sobre las buenas prácticas y conocimiento de la ciencia. Instalar cámaras en los mataderos supondrá un incremento en los costes de producción, algo que no quieren los consumidores, de nuevo volvemos a la habitual estrategia de la amenaza de subir precios, algo a lo que recurre la industria con relativa frecuencia, aunque en este caso sería interesante que explicaran cómo las cámaras pueden influir en el aumento de precio de los alimentos. A esto hay que añadir que también se argumenta que las cámaras de vídeo podrán suponer una violación de la libertad fundamental de un individuo.
Podemos pensar que si realmente se hacen bien las cosas, no debería suponer mayor problema que se instalaran las cámaras, el hecho de oponerse a ello delata que algo no se hace correctamente. Esta polémica reforma dará que hablar a lo largo de los próximos meses, posiblemente la industria alimentaria de otros países comunitarios, teman que la medida se apruebe, ya que se podría producir un efecto dominó.
Posiblemente coincidiréis en que es mejor comer alimentos sabiendo que los animales que los han producido han recibido un trato digno. Por cierto, os recordamos que ayer os hablamos del ranking de empresas alimentarias que más respetan el bienestar animal de 2016, sus resultados delatan que queda mucho trabajo para garantizarlo, de todo ello os hablábamos aquí.
Foto 1 | Ethique & Animaux L214
Foto 2 | Jennifer C.