Hace unos días, la asociación alemana Foodwatch, organización sin ánimo de lucro cuya finalidad es intentar defender los intereses y derechos de los consumidores, puso en marcha una nueva campaña contra el uso no declarado de gelatina animal en los zumos de frutas, aunque hay que decir que desde hace unos años, esta asociación lucha para que se ponga solución a una laguna legal que hace posible el uso de gelatinas de origen animal como coadyuvante sin que sea necesario especificarlo en el etiquetado de los zumos.
La organización alemana comenta que no declarar este uso en el envase del producto no viola la legislación comunitaria, pero es un engaño a los consumidores. Esta gelatina animal se utiliza como agente para la clarificación, es un coadyuvante que no se considera un ingrediente alimentario, ya que no aparece en el producto final, sin embargo, sí es posible que puedan aparecer en los zumos en forma de residuos, sin que ello suponga un riesgo para la salud. Foodwatch exige el etiquetado obligatorio para todas aquellas bebidas y alimentos que contienen sustancias de origen animal, aunque sean residuales o sólo se hayan utilizado en la elaboración. En general, solicita la inclusión en las etiquetas alimentarias de cualquier coadyuvante de elaboración, aromas u otros aditivos.
Se considera que esta práctica de la industria alimentaria no es grave, pero es necesario que el consumidor conozca el uso de estas sustancias de origen animal para que pueda decidir si quiere o no comprar el producto según su criterio y convicciones. Por ejemplo, uno de los pilares de la dieta vegana (muchas personas la siguen en este país) es no usar o consumir productos obtenidos a partir de los animales, por lo que la gelatina de origen animal en los zumos atentaría a sus convicciones. Muchas personas que son veganas o vegetarianas pueden adquirir estos zumos considerando que están adaptados a su filosofía alimentaria, pero no es así. Hay que aclarar que en el mercado podemos encontrar zumos que se han elaborado utilizando gelatina animal y sin ella.
La gelatina animal es una mezcla de proteínas y péptidos que se han obtenido mediante un proceso de hidrólisis parcial, del colágeno extraído de diversas partes de diferentes tipos de animales, sea ganado, vacuno, porcino, etc. Principalmente procede de la piel, de las pezuñas, de los huesos hervidos y molidos, o de las vísceras entre otros. La gelatina animal resultante se suele utilizar como espesante en el procesado de los zumos multivitaminas, Foodwatch exige una regulación por ley, preferentemente a nivel comunitario, pero si la CE obvia esta solicitud, considera que al menos el Gobierno alemán debería implantar la medida en el país.
En la actualidad se puede etiquetar de forma voluntaria que un zumo de frutas es vegano o vegetariano, lo que elimina el uso del coadyuvante, pero es algo insuficiente. La explicación es sencilla, la mayoría de los consumidores no se fijan en la identificación “vegano o vegetariano”, no esperan que en un zumo de frutas 100%, tal y como se anuncia, contenga ingredientes derivados de los animales, o que se hayan elaborado con estos.
La industria insiste, se trata de un elemento que ayuda a aclarar los zumos eliminando materiales y partículas que lo enturbian, la gelatina se une a estos compuestos y se puede retirar completamente del zumo, por tanto no se puede hablar de aditivo. Sin embargo, algo que se reivindica es que incumple la no intervención de un producto de origen animal en la elaboración. Ante esta llamada de atención de la asociación alemana, las empresas argumentan que utilizan la gelatina porque es el método tradicional de elaboración, que la información se puede consultar a través de la página web del producto, que no habían recibido ninguna información sobre los ingredientes de sus propios proveedores, y toda una serie de excusas que no convencen a FoodWatch.
Sin embargo, algunas compañías son conscientes del problema y de los diferentes tipos de dieta que sigue la población, por ello, trabajan para intentar proporcionar los productos más adecuados a cada tipo de consumidor, no dudando en cooperar y trabajar con nuevos métodos que no utilicen elementos de origen animal para el procesamiento de los zumos. Para conocimiento de los consumidores, se ha dado a conocer qué marcas de zumos se elaboran sin el coadyuvante y qué marcas sí lo utilizan, esto educa y ayuda a esos consumidores que no quieren que sus zumos se hayan elaborado utilizando elementos de origen animal. Quizá de este modo se obligue a la industria, a tomar medidas para evitar la pérdida de ventas.
Como ya hizo hace cuatro años, la organización alemana vuelve a solicitar firmas en su campaña, exigiendo que las autoridades tomen cartas en el asunto y eliminen las lagunas legislativas que permiten el uso de la gelatina animal sin que sea necesario identificarlo en las etiquetas de los productos. Este problema se puede trasladar a países como España, ¿cuántos consumidores veganos o vegetarianos, son conscientes de este problema?
Sobre estas líneas podéis ver el vídeo difundido en la campaña realizada en el año 2012. En la actual, de momento se han logrado superar las 135.000 firmas, a través de este artículo publicado en la página oficial de FoodWatch, podréis conocer todos sus detalles.
Foto | Yu. Samoilov
2 comentarios
Aunque no se viole la legislacion europea, es una estafa, estamos siendo estafados por estafadores que viven estafando y de estafar a los demas
Lo mejor para el organismo es esa gelatina ya que beneficia huesos, cartílagos y células en general