Hasta la fecha, la Guía Zagat ha valorado diferentes conceptos de los restaurantes, la comida, la decoración, el servicio y el precio del menú con un rango de puntuaciones de 0 a 30. Un restaurante que dejaba mucho que desear recibía de 0 a 10 puntos, de 11 a 15 puntos calificaba de regular a satisfactorio, de 16 a 20 puntos puntuaba al establecimiento en el rango de bueno a muy bueno, de 21 a 25 puntos la calificación era de muy bueno a excelente y finalmente, la calificación de 26 a 30 puntos era de un restaurante considerado de extraordinario a perfecto.
Pues bien, este sistema que ha funcionado durante muchos años se ha abandonado, la Guía Zagat cambia su sistema de calificación por un sistema de puntuación que va de 1 a 5. Pero hay más cambios, se ha lanzado una nueva aplicación móvil, se ha modificado la página web y se ha presentado un nuevo logo, cambios que tienen su raíz en la compra de Zagat por Google en el año 2011. Ahora la guía calificará con estrellas y se valora la comida, el servicio y la decoración con una puntuación de 1 a 5 que incluye decimales, se podría decir que lo que se ha hecho es utilizar una calificación con un sistema similar al que utilizan páginas como TripAdvisor o Yelp.
Con el antiguo sistema los comensales podían realizar distinciones entre establecimientos que prácticamente recibían la misma puntuación, podemos dar un vistazo a la clasificación de los 50 mejores restaurantes de Nueva York 2016 para tener una idea más clara sobre cómo funcionaba el sistema. Tras examinarlo, se constató que muchas personas preferían un sistema de calificación más simple y directo, por lo que se decidió adaptar el formato a las exigencias de los usuarios que consultan esta guía. Hasta la fecha se ha considerado que la Guía Zagat es sinónimo de opinión democrática, pues es la opinión y el disfrute de los comensales la cuestión más valorada, en teoría, los cambios que se han ido introduciendo no van a alterar esta percepción.
Zagat ya no imprime guías de restaurantes como antaño, tan sólo conserva una publicación en papel, la de la guía de restaurantes de Nueva York, lo que ha hecho ha sido potenciar el contenido digital, tanto la página web como la app incluyen nuevos contenidos que pretenden satisfacer las necesidades de los comensales de hoy en día, como por ejemplo los 10 mejores restaurantes de reciente apertura, los 11 restaurantes donde hay que probar sus sándwiches, los mejores restaurantes para disfrutar de una comida económica, los 10 mejores restaurantes para comer un brunch, etc.
Según algunos expertos, Zagat perdió brillo durante la era digital, la razón es que la competencia intensificó su trabajo en los medios online, aunque habiéndola adquirido Google era lógico que se le diera un empujón al contenido digital, pero, el cambio realizado sobre la valoración y puntuación ¿podrían dañar y debilitar la capacidad de Zagat para diferenciarse? Hay quien considera que sí, asegurando que el nuevo sistema proporciona menos información a tener en cuenta. Con el sistema antiguo se hilaba más fino y se apreciaban mejor las diferencias, es más, hay consultores que consideran que con el nuevo formato se pierde información.
Google asegura que no se pierden todos los matices, ya que se califican tres categorías, comida, decoración y servicio, dejando en el camino el precio medio del menú. Lo cierto es que este cambio no es tan significativo, quizá se ofrece algo menos de información, pero parece que los comensales lo que más valoran es una calificación global identificada con la escala de uno a cinco. Google ha estado trabajando en su guía para hacer frente a la competencia, la ha acercado poco a poco al sistema utilizado por otras guías, de ahí que en alguna ocasión, tal y como leemos aquí, se le haya acusado de manipular el contenido para favorecer los resultados de la Guía Zagat en las búsquedas.
Zagat ha sido una guía que se ha basado en una simple premisa, las opiniones de miles de consumidores deseosos de disfrutar de una buena comida y de un magnífico servicio, opiniones que para muchos han sido muy importantes y más precisas que las que pueden aportar los críticos gastronómicos. Siempre se ha afirmado que desde que se creó en 1979, es una guía de restaurantes creada por y para los clientes. Ahora Google introduce cambios, nuevos contenidos, nuevo sistema de calificación… posiblemente habrá nuevos cambios y no tardaremos mucho en conocerlos.