Se ha hecho muy popular la denominación de huevo flor o flor de huevo para identificar a un tipo de elaboración con este alimento que también se ha popularizado muchísimo en los últimos años, porque es una forma de cocinarlo muy saludable, sencilla y que proporciona una presentación llamativa. Seguramente todos lo habéis hecho, e incluso lo hacéis habitualmente para vuestras comidas y cenas, y aunque la foto lo dice todo, vamos a ver qué es un huevo flor.
Aunque muchos de vosotros ya lo conoceréis así, para la mayoría se trata de un huevo pochado o un huevo poché hecho en film de cocina transparente. Seguramente sobran explicaciones de por qué se llama huevo flor o flor de huevo, y es que al cocer el huevo bien envuelto y formando un saquito con el film, la clara cuajada parece una flor.
Para quienes todavía no hayan cocinado un huevo poché con este sistema, podéis leer la elaboración paso a paso en el post Cómo hacer huevos poché, aunque hay que decir que este nombre originalmente se le daba a los huevos escalfados en agua con vinagre, sin el film de por medio, pero el truco de envolverlo hace que la técnica sea fácil y siempre salga bien.
El éxito de los huevos flor se debe, además de a la sencillez de su elaboración y a la bonita presentación que proporcionan, como comentábamos, a que es una cocción saludable y además permite disfrutar de lo que más nos gusta a todos del huevo, la yema fluida en la que se puede mojar pan, patatas… o que puede impregnar con su sabor y cremosidad los ingredientes con los que se acompañe.
Si queréis algunas ideas de platos en los que podéis incluir un huevo flor o huevo poché, aquí podéis encontrar un recopilatorio con doce recetas, pero en el blog hay algunas más.