Por distintos motivos puede haber en la despensa chocolate con leche, y concretamente en estas fechas puede ser por las figuras de la Mona de Pascua. En casa casi todos los años pasa igual, principalmente cuando a alguien de la familia se le ocurre comprar una mona enorme, con grandes figuras de chocolate que después no se come. Por eso anteriormente pudimos enseñaros el truco para aprovechar el chocolate de las figuras de Pascua, podéis recordarlo aquí.
Pero en esta ocasión hemos querido hacer otra cosa con el chocolate con leche y lo compartimos con vosotros porque también podréis hacerlo, sea con una tableta, con restos de una figura de la Mona, con los clásicos huevos que los niños os piden por la sorpresa del interior… a continuación os explicamos cómo aprovechar el chocolate con leche si os gusta el chocolate negro.
Es muy sencillo, se trata de fundir el chocolate troceado y añadirle cacao puro en polvo. La cantidad puede variar según el gusto de cada uno, y en principio no es necesario añadirle nada para endulzarlo, pues a quienes nos gusta el chocolate negro no nos gusta que esté demasiado dulce.
Sobre qué se puede hacer con este chocolate con leche reconvertido, pues lo que haríais con cualquier chocolate fundido, brownies, bizcochos, galletas, magdalenas, helados, coberturas, flanes, natillas, siropes… Nosotros hemos hecho unos bombones muy sencillos, para lo que simplemente hemos añadido un poco de mantequilla de avellana. Os lo explicamos a continuación.
Ingredientes
- 200 gramos de chocolate con leche
- 20 gramos de cacao puro en polvo
- 60 gramos de mantequilla o pasta de avellanas.
Elaboración
Trocea el chocolate y ponlo en un cuenco apto para microondas. Programa un minuto para que el chocolate se funda, si es necesario amplía el tiempo en periodos de no más de 30 segundos. No lo pongas hasta que esté totalmente fundido, aunque queden trozos enteros, con el calor se han ablandado y al remover se terminarán de fundir.
Una vez fundido y batido el chocolate con leche, añade el cacao en polvo y mezcla bien, que no queden grumos. Entonces pruébalo por si quieres que el sabor sea más intenso o si crees que necesitas endulzarlo algo. El chocolate que ha visto aumentado el porcentaje de cacao puede considerarse un chocolate negro y ya está listo para lo que quieras hacer.
En el caso de los bombones, añade la mantequilla de avellanas, que debe tener una densidad similar a la del chocolate, y mezcla bien. Una vez que tengas una crema homogénea, rellena el molde para bombones y deja enfriar a temperatura ambiente, hasta que se enfríen, después podéis conservarlos en el frigorífico.
Esperamos que esta idea os resulte práctica para aprovechar el chocolate que no es de vuestro agrado, si vuestra preferencia es el chocolate negro, a partir de ahora no será necesario que tiréis el chocolate con leche, ya sabéis que no hay que desperdiciar ningún alimento.