Las aves asadas al horno proporcionan exquisitas experiencias gastronómicas, aunque en ocasiones son más favorables para unos que para otros, por ejemplo cuando te toca el muslo de un pavo asado, pues es una de las partes más jugosas, mientras que a quien le toca la pechuga le suele convencer la salsa con la que se acompaña, pues es la que aporta la jugosidad que le falta a ese corte del ave. Quizá el problema es centrarse en que en Navidad hay que asar un pavo entero, ¿pero por qué?, si van a disfrutar mucho más los comensales que tengan muslo, incluso el contramuslo queda jugoso.
Pues para que todos disfruten por igual, una buena opción es sustituir el pavo entero asado por piernas preparadas para asar como la que podéis ver en esta receta. Además, hemos preparado una receta de pavo asado muy fácil de elaborar y con sabores muy elegantes para que sea apropiada para el menú de Navidad.
Así que os dejamos con la receta de Pierna de pavo asado con jengibre y romero, con unas patatas moradas como guarnición que se hornean en la misma bandeja, además unos ajos asados que si se pelan y se preparan como un paté (como este), resultará exquisito para acompañar las patatas. Tomad nota de la receta, esperamos que os guste.
Ingredientes (4-6 comensales)
- 2 piernas de pavo para asar
- 2 cabezas de ajos
- 1 trozo grande de jengibre fresco (más de una nuez)
- c/n de pimienta negra recién molida
- 4-5 ramitas de romero
- 300-350 gramos de vino blanco
- c/n de sal
- c/n de aceite de oliva virgen extra
- 8-10 patatas violeta.
Elaboración
Precalienta el horno con calor arriba y abajo a 200º C. Limpia las piernas de pavo de piel y de la posible grasa que pueda tener, aunque se puede dejar un poco. Quita la piel superficial de las cabezas de ajo, y córtalas por la parte en la que no está el nudo, lo suficiente para que se vean los dientes de ajo.
Pela el jengibre y rállalo, extiéndelo por los dos lados de las piernas de pavo, que además salpimentarás al gusto y untarás con aceite de oliva virgen extra. Frota para que los condimentos impregnen bien la carne.
Pon las piernas en la bandeja del horno y reparte sobre ellas unas ramitas de romero y unas hojas de romero picadas, además de algunos dientes de ajo en camisa. Moja con el vino blanco e introduce la bandeja en el horno, a altura media, y programa unos 90 minutos.
Pasada la primera media hora dale la vuelta a las piernas, moja con una cuchara con el jugo de la bandeja y prosigue la cocción. Cuando pasen otros 20 minutos añade las patatas violetas bien lavadas, cortadas por la mitad y condimentadas con sal, aceite de oliva virgen extra y romero.
Continúa con el asado unos 10-15 minutos vuelve a dar la vuelta a las piernas y mójalas con el jugo de la bandeja, ahora pon ésta a una altura ligeramente superior para que el pavo se dore por encima.
Cuando pinches la pierna de pavo por la parte en la que se unen muslo y contramuslo y no salga un jugo rojizo, estará lista, también lo comprobarás porque la carne se empieza a separar del hueso. Retira del horno.
Emplatado
Sirve las piernas de pavo asadas en bandejas acompañadas de los ajos y las patatas, o córtalo en las raciones necesarias y repártelas en los platos con las patatas asadas y el jugo de cocción de la bandeja. Para aprovechar lo que queda adherido a ella, recuerda que puedes desglasar con un poco de vino o agua. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria