En lugar de una tarta o pastel de los que se han puesto de moda en los últimos años, hoy vamos a hablar de algo más clásico, pues vamos a ver qué es un Slab Pie. Con este nombre se define a un tipo de pastel que todos hemos comido en alguna ocasión, y con más seguridad en su versión salada, pues como podéis apreciar en la foto que ilustra estas líneas, es un pastel en formato de empanada.
Claro, hay que decir que hay muchos tipos de empanada, y no hablamos de la versatilidad en cuanto el relleno, sino a la forma. Sólo en España, hay tradición de hacer empanadas rectangulares, redondas y muy abombadas, según la región. En algunos países hispanohablantes llaman empanada a lo que nosotros llamaríamos empanadillas. En fin, es todo un mundo el de las empanadas, pero como cada uno tenemos nuestra historia y tradición culinaria, nosotros relacionamos la empanada con El Bierzo y Galicia.
Slab pie se podría traducir como Pastel losa o Pastel plancha, término bastante determinante para hablar de un pastel que se compone de dos planchas rectangulares de masa con un relleno. Se puede hacer con distintos tipos de masa, desde una masa quebrada o masa brisa, a un hojaldre u otras similares, lo que se busca es que sea una masa crujiente y rica.
Y parece ser que también se tiene en cuenta que es un pastel que da mucho más de sí, es decir, que pueden comer más personas que con los clásicos ‘pies’ redondos (que suelen tener unos 22 cm. de diámetro), también de tipo empanada pero más altos porque llevan más relleno. También es más fácil que se desmoronen a la hora de comerlos, y qué decir de querer llevar una porción a la escuela o al trabajo para desayunar…
Además, es un pastel para el que no es necesario disponer de un molde en particular, basta la masa para mantener su forma y su relleno, aunque es muy habitual utilizar la bandeja del horno para hacerlo, así que imaginad el tamaño que puede tener el pastel, y también a cuántos comensales se puede satisfacer.
Quizá la presentación de las empanadas dulces como pastel no es tan llamativa como otros formatos de tarta, pero hay formas de verlo, un Slab pie puede ser un delicioso pastel de aspecto rústico, que también tiene sus adeptos, cada vez más. De todas formas se pueden hacer atractivas presentaciones de este tipo de pasteles, pues con la masa que cubre se pueden hacer decoraciones, enrejados, bordes decorativos…
Podríamos hacer un Slab pie cada día y que fuera diferente, pues se puede rellenar con todo tipo de frutas, cremas de pastelería, mermeladas… Tal vez ya tenéis vuestro favorito, ¿quizá el pastel de manzana?