Ricard Camarena Restaurant, restaurante gastronómico reconocido con una estrella Michelin y tres soles Repsol, Canalla Bistró, la barra con la cocina más eclética del chef valenciano, y Central Bar, el bar del Mercado Central de Valencia, estos son los tres establecimientos que Ricard Camarena montó en la capital del Turia en muy poco tiempo y ya se han consolidado, así que continúa su expansión con un nuevo restaurante y una nueva oferta gastronómica.
Habitual es el nuevo restaurante de Ricard Camarena en Valencia, y tiene prevista su apertura el próximo mes de septiembre, una vez que concluyan las obras del espacio ubicado en la planta inferior del Mercado de Colón de Valencia, donde el cocinero tiene el Ricard Camarena Lab, donde se desarrollan cursos y talleres de cocina. Además en la parte alta del Mercado está La Cambra, está destinada a eventos exclusivos.
La pregunta que nos podemos hacer al conocer la noticia de la apertura de un nuevo restaurante de Ricard Camarena, es con qué concepto o qué ofrecerá en él. Pues la respuesta es sencilla y clara, Habitual será un restaurante en el que disfrutar de los sabores mediterráneos, desde la Provenza francesa hasta Tarifa, alcanzando también las islas y parte de las costas italianas. Así lo define en la página web que ya tiene la cuenta atrás para la apertura de Habitual.
También explica que su filosofía de cocina será la misma, primarán los productos de temporada y de proximidad, y el sabor. Intentará recuperar algunas creaciones culinarias que se han perdido, fusionará las culturas de todo el Mediterráneo occidental, y todo ello se elaborará con productos locales.
El chef valenciano trabaja codo con codo con los agricultores valencianos y afirma que casi se pueden cosechar ‘verduras a la carta’, siempre respetando su temporalidad y la huerta valenciana. De algún modo explica que la Comunidad Valenciana no sólo tiene mar y sus nobles y excelentes productos, hay que dar la cara por y para la huerta y su tradición, pues es muy rica y generosa, y será muy fácil hacerla evolucionar.
Ricard Camarena quiere que quien visite el Restaurante Habitual encuentre comida confortable, de hecho, ese es el eslogan que acompaña al nombre del nuevo local de restauración del cocinero valenciano. Y de momento no se sabe mucho más, si queréis estar informados de todas las novedades, podéis acceder a su web.
1 comentarios
Ubicado en uno de los edificios valencianos más emblemáticos
el mercado de Colón fue proyectado por el arquitecto Francisco Mora Berenguer a principios del siglo XX, por lo que se trata de una de las obras más representativas del modernismo valenciano.
Aprovechando las jornadas de «Cocina abierta» decido probar en uno de los mejores.
El chef Ricard Camarena ( 2 estrellas Michelín y 1 sol Repsol) ha conseguido una conjunción perfecta en sus platos donde trasmite un equilibrio de sabores con cuatro entradas, abundantes por cierto a pesar de ser para compartir.
Comenzamos con Ensaladilla rusa Ricard Camarena con espuma de aceitunas rellenas, suave, exquisita, muy fácil degustarla.
Continuamos con Alcachofas confitadas con stracciatella de burrata (es un queso fresco de leche de vaca o búfala, de pasta hilada) trufada y vinagreta de guanciale (Carrillo de cerdo). Una buena cocción y alcachofas pequeñas de temporada hacen que sean muy fáciles de comer. La vinagreta con acidez justa.
Para continuar con la progresión de entrantes Tartar de bonito con vinagreta de lenteja «Caviar». Tratamiento limpio con un punto de maceración correcto. Dado mi desconocimiento de las lentejas caviar ( pequeñitas y negras) no conseguí apreciar el tratamiento que se les aplica, quizá por cierta aversión que tengo hacia esa legumbre.
Concluimos los entrantes con
Brócoli frito con mayonesa de ras el hanut ( combinado de especias del Magreb), sésamo, feta y hierbas.
Posiblemente hubiese preferido que en lugar de brócoli hubiera sido coliflor. Como todo lo demás bien cocinado con un rebozado crujiente que me pareció tempura, el queso feta le da un sabor especial.
Prácticamente repletos nos llega el plato principal.
A ELEGIR:
Mogote frito ahumado con «mutabal» (crema de berenjenas) de coliflor y especias.
O
Rape de playa con «amatriciana» de tomates y judías.
Como éramos cuatro comensales pedimos dos de cada y los compartimos.
El mogote (cabecera de lomo) ahumado a poca temperatura estaba tiernisimo y muy sabroso, para recordar.
El rape, terso -como debe ser- sus pequeñas habas de temporada muy tiernas y la salsa de tomate formaron en mi boca un espectáculo de luz y color.
¡Y quedan los postres!
A ELEGIR:
Tarta de queso con frutos rojos y yogur
O
Bizcocho templado de chocolate con helado de caramelo salado.
¿Que se puede decir de ellos?
Simplemente lo que se espera de los postres, dulces pero no empalagosos, que te dejen un buen recuerdo en el paladar sin que se queden pegados a él. Excelentes los dos, claro para mí que soy un vicioso del chocolate, me quedo con el segundo, eso sí combinando el bizcocho con el helado.
En cuanto al restaurante, espacioso muy abierto, cocina a la vista, mobiliario cómodo, muy buen servicio y precio adecuado.
Lugar para repetir.