Hemos aprovechado las últimas mandarinas ‘del terreno’ que teníamos, dulcísimas y con mucho jugo, para hacer un ligero y sabroso guiso de pollo. Y queremos compartir la receta con vosotros porque es un plato para chuparse los dedos, además de ser nutritivo y muy sano.
Este Guiso de pollo con mandarinas y cilantro se hace en menos de una hora entre los preparativos y la cocción, así que no es necesario esperar a un día especial o con mucho tiempo para cocinar para hacerlo. Creemos que os va a encantar, las especias utilizadas, canela, clavos, cinco pimientas… dan a esta carne blanca un sabor exquisito.
Ingredientes (4 comensales)
- 8 muslos de pollo
- ¾ de cebolla morada
- 4 dientes de ajo
- 1 trozo de raíz de jengibre (tamaño de una nuez)
- 4 clavos de olor
- 1 c/c de cilantro en grano
- 1 c/p rasa de canela en polvo
- ½ c/p de cinco pimientas
- ½ c/p de lemon grass en polvo
- ½ c/c de chile en polvo
- 1 c/c de orégano seco
- 3-4 ramitas de cilantro fresco
- 3 mandarinas
- c/n de agua
- aceite de oliva virgen extra
- sal.
Elaboración
Puedes hacer este guiso de pollo en tajine, si no tienes puedes utilizar una cazuela baja o una sartén grande. Pon el recipiente elegido con un poco de aceite de oliva virgen extra a calentar y dora en él los muslos de pollo a los que habrás retirado la piel y habrás salado al gusto.
Mientras tanto, pela y pica la cebolla en brunoise, a los ajos dales un golpe pero déjalos en camisa, con la piel, pela el jengibre y córtalo en dos o tres trozos, así después lo puedes retirar si lo deseas, también puedes rallarlo y así comerlo después sin apenas notarse.
Una vez que el pollo esté dorado por todos los lados, retira la cazuela del fuego para que pierda un poco de calor e incorpora la cebolla, los ajos y el jengibre, vuelve a poner la cazuela al fuego, pero bajando la temperatura para pochar la cebolla. Ve moviendo de vez en cuando y una vez que la cebolla esté tierna empieza a añadir las especias, manteniendo el fuego suave para que tomen temperatura pero no se quemen.
Añade los clavos, el cilantro, la canela, las cinco pimientas, el lemon grass, el chile y el orégano. Pica el cilantro y añádelo también, dale un par de vueltas al pollo para que se impregne de las especias y a continuación añade las mandarinas bien limpias (a poder ser ecológicas) y cortadas en rodajas.
Moja con un poco de agua, la justa para que cubra la base y así se recoja todo el sabor, ayúdale frotando con una espátula. Sube ligeramente el fuego (para ponerlo a fuego medio o a la temperatura en la que burbujee levemente) y guisa el pollo durante 25 o 30 minutos, con la tapa puesta pero sin encajar para que haya salida de vapor, y dándole la vuelta a los muslos de vez en cuando.
Cuando veas que la carne se separa del hueso y que el agua se ha evaporado dando paso a un jugo almibarado, retira del fuego.
Emplatado
Sirve dos muslos de pollo por comensal, acompañados de unas rodajas de mandarina y el jugo de la elaboración. Sirve un buen pan y ¡buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria