Nos encontramos en temporada de uvas y podemos disfrutar de una gran variedad de ellas, no sólo guiándonos por el color (blancas, rosadas o negras), los distintos tipos de uva de los que disponemos, proporcionan distintos sabores, las hay más dulces, más ácidas, más jugosas…
Pero no es del consumo de uvas de lo que queremos hablar, sino de un truco de cocina que os puede interesar, como habéis leído en el título, se trata de congelar uvas para utilizarlas como cubitos de hielo.
Las uvas son una de las frutas que soportan el congelado tal y como son, sin necesidad de pelarlas, triturarlas… pero sobre ello podremos hablar en breve, puesto que estamos en temporada de esta fruta y os puede interesar para disponer de vuestras uvas favoritas en cualquier momento.
Retomando el truco de cocina, pensamos que os puede interesar tanto si tenéis necesidad de enfriar una bebida, como si queréis presentar una copa más llamativa a vuestros invitados, pues cuántos recursos hay para hacer cubitos de hielo diferentes y originales… nada mejor que aprovechar las uvas.
Lo interesante de utilizar las uvas como cubitos de hielo es que no van a aguar la bebida, por lo que es ideal para enfriar vino, cava u otras bebidas que no queramos que se mezclen con agua. Ahora bien, las uvas congeladas no van a enfriar igual que lo hacen los cubitos de hielo, quizá la idea es mantener el vino fresco durante más tiempo, a no ser que se pongan muchas uvas congeladas.
Otro tanto positivo para este truco es que después de bebernos el vino, podremos comernos las uvas, como hacemos con las aceitunas del vermú.
Foto | Eunice
