Los pralinés son una delicia que principalmente se utilizan en elaboraciones dulces, aunque evidentemente hay excepciones, los frutos secos son ideales para todo tipo de platos, pero estando en otoño, el que no puede faltar es el elaborado a partir de las castañas, no es uno de los más habituales, pero seguramente será porque mucha gente no lo ha probado. Una vez que descubres el Praliné de castañas, siempre encuentras ocasión para degustarlo.
A continuación os explicamos la sencilla fórmula para hacer el praliné de castañas que podréis utilizar para hacer cremosos rellenos de galletas, bizcochos, tartas… os daremos algunas ideas, y no sólo en elaboraciones dulces, este praliné acompaña muy bien a carnes, a verduras y hortalizas. ¿Estáis ya imaginando algún plato?, compartidlo con nosotros y lo probamos.
Ingredientes
- 150 gramos de castañas asadas
- 100 gramos de azúcar
- 100 gramos de agua (TPT).
Elaboración
En primer lugar hay que proceder a la elaboración de las castañas, es decir, asarlas. Puedes hacerlo como tienes por costumbre, en la sartén, en el horno, en las brasas… La cantidad necesaria indicada en los ingredientes es una vez peladas, así que deberás poner más cantidad. Una vez hechas, pélalas y reserva.
Pon en un cazo de fondo grueso el agua y el azúcar, lleva a ebullición y reduce a continuación el fuego, deja cocer hasta conseguir un caramelo rubio.
Llegado ese momento, vierte las castañas troceadas groseramente, retira el cazo del fuego y mueve los frutos para que se impregnen con el caramelo. A continuación vierte las castañas sobre papel vegetal.
Para finalizar, tritura las castañas a máxima potencia, si es necesario para obtener una pasta de praliné, añade un poco de agua. Estará listo para usar o para guardar en un tarro con tapa hermética en el momento en el que sea necesario.
